Los expertos del CERN preparan las primeras colisiones de protones en los próximos días
El nuevo gran acelerador de partículas LHC está a punto de producir en los próximos días las primeras colisiones de protones aunque aún a baja energía. Tras 14 meses dedicados a la reparación de la grave avería que se produjo el año pasado en la máquina cuando apenas se habían empezado a inyectar los haces y antes de producir ninguna colisión, los expertos del Laboratorio Europeo de Física de partículas (CERN), junto a Ginebra, han hecho que el primer haz de protones complete la circunferencia de 27 kilómetros de la gran máquina científica. El siguiente paso es inyectar y hacer circular el haz que debe ir en sentido opuesto y luego hacerlos colisionar en algunos puntos del acelerador.
"Es estupendo ver el haz circulando en el LHC otra vez", ha dicho el director del CERN, rolf Heuer. "Todavía nos falta un tramo por recorrer para empezar a hacer física de nuevo pero este hito significa que vamos bien encaminados". El primer haz de partículas circuló por primera vez en el LHC el 10 de septiembre de 2008, pero nueve días después se produjo el accidente que ha paralizado las operaciones durante más de un año.
La puesta en marcha tras la reparación comenzó hace unas semanas con el enfriado hasta 271 grados bajo cero del acelerador (temperatura de operación de los imanes superconductores del LHC). Luego, el 23 de octubre pasado, los expertos empezaron a inyectar haces de protones en el nuevo acelerador para ir probando sector por sector, pero sin completar todo el anillo. Elplan, tras completar los dos haces, es iniciar las colisiones a baja energía, es decir, sin acelerar las partículas en el gran acelerador. Eso será en el plazo de una semana si todo va bien, según ha infomrado el CERN en un comunicado. Luego se irá aumentando la potencia poco a poco para llegar a 3,5 TeV (teraelectronvoltios) por haz el año que viene.
El LHC está formado por centenares de grandes imanes alienados hasta completar la circunferencia de 27 kilómetros excavado a una profundidad de unos 100 metros en la frontera franco-suiza. Los haces de protones, acelerados hasta casi alcanzar la velocidad de la luz, circulan en ambos sentidos y se harán chocar en cuatro puntos, justo en medio de los cuatro gigantescos detectores que registrarán los efectos de esas colisiones. Los detectores (Atlas, CMS, Alice y LHCb) están listos desde hace un año. En los efectos de las colisiones de partículas los físicos investigarán las leyes que rigen el funcionamiento de los componentes fundamentales de la materia.
Viejo Condor
El Pais.com (SIC)