El ministro de Exteriores de Austria, Sebastian Kurz, ha reconocido en una entrevista al diarioKommersant que las sanciones a Rusia y las contramedidas de Moscú afectan tanto al país euroasiático como a los Veintiocho, pero señaló que la UE está “preparada a pagar el precio”.
El diplomático hizo estas declaraciones en vísperas de la reunión del Comité de Representantes Permanentes de la Unión Europea que examinará este martes la situación en Ucrania y el cumplimiento de los acuerdos de Minsk y puede verter luz sobre el futuro de las sanciones impuestas por Bruselas a Moscú.
“Las sanciones y las contramedidas afectan no solo a Rusia sino también a los miembros de la UE. La Unión Europea no ha podido quedarse de brazos cruzados ante el conflicto (en Ucrania). Estábamos obligados a reaccionar a una violación del derecho internacional y optamos por la vía política, es decir las sanciones, y no por el uso de fuerza”, indicó Kurz.
Añadió que “nadie está contento con que se hayan requerido las sanciones”. “No nos proponemos trazar nuevas líneas divisorias: creo que 25 años después de que cayera el muro de Berlín y terminara la Guerra Fría la retórica de bloques políticos y militares debe estar donde le corresponde, en manuales de historia”, afirmó.
Según Kurz, Austria confía en que la crisis en Ucrania se resuelva por vía pacífica y negociada. Calificó de un resultado “muy positivo” el alto el fuego en el este del país.
“Ya veremos cómo evoluciona la situación. (…) Queremos un arreglo duradero de ese conflicto con garantías de respeto de la soberanía y la integridad territorial de Ucrania”, dijo el canciller.
Bruselas, afirmó, no pretende hacer que Ucrania elija entre Rusia y la Unión Europea. “Debe tener una oportunidad de colaborar con ambas partes lo que permitirá evitar que se fortalezca el pensamiento de bloques que últimamente se ve revitalizado tanto en Europa como a nivel global”, señaló Kurz.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)