viernes, 16 de diciembre de 2011

Petroleo azul



Para obtener este petróleo ecológico, bastan solo la luz solar y el dióxido de carbono. No se trata de excavaciones de yacimientos naturales de crudo, sino de la producción industrial de un combustible que podría sustituir al petróleo fósil.

Aunque en el mundo actual abundan investigaciones en el campo de la producción de nuevos tipos de petróleo, se puede considerar a Bio Fuel System, una empresa con participación española, italiana y francesa, como la pionera de la energética del futuro. Esta compañía emplea con éxito una tecnología vanguardista, desarrollada a lo largo de los últimos años.

Este año en Alicante, España, se puso en marcha Blue Petroleum ONE, el primer modelo de planta industrial del mundo capaz de producir este revolucionario combustible de forma rápida, informa la revista española ARN digital. La instalación cuenta con seis biorreactores para su producción.

La base del sistema son microalgas especiales que se cultivan en tubos de metacrilato. Estos organismos, como otros vegetales, se alimentan de CO2 y para generar un barril de 159 litros se necesitan 2.168 kilogramos de CO2, de los que 938 nunca volverán a la atmósfera. El gas para la instalación proviene de una cementera cercana.

Según los cálculos de la empresa, la producción de 20 millones de barriles diarios de este combustible, podría reducir el 20% de emisiones de CO2 del mundo. Un campo de biopetróleo semejante al de Alicante, de 50 por 60 kilómetros de superficie, produciría los 1,5 millones de barriles de crudo que consume España cada día, neutralizando 1,4 millones de toneladas de CO2 diarias.
La producción del 'petróleo azul' no solo ayudaría a reducir el CO2, sino que también es una gran alternativa a otros tipos de energía, concretamente a la nuclear. Según los datos de la compañía, para reemplazar a una central nuclear de 1.000 MW de potencia se necesitaría un campo biopetrolífero de 55 kilómetros cuadrados (lo que significa que para reemplazar toda la potencia nuclear de España, bastaría un territorio total de  430 kilómetros cuadrados de superficie).

En cuanto al precio del petróleo ecológico, este oscila entre los 60 y los 70 dólares por barril, por lo que resulta muy competitivo (un barril de crudo natural cotiza a 100 dólares y ha llegado a alcanzar precios considerablemente más altos). Además, Bio Fuel System ofrece varios derivados de la materia prima inicial que también pueden ser comercializados con éxito. “A día de hoy se puede afirmar y demostrar que reducir la dependencia energética de Europa es una posibilidad tangible, al mismo tiempo que se combate el cambio climático”, afirma la empresa.

Cada día más investigadores informan sobre sus hallazgos en el ámbito de los biocombustibles, que prometen una verdadera revolución energética. Por ejemplo, los científicos de la Universidad de Cádiz desarrollan un método para reciclar los residuos de la cerveza, con el objetivo de producir no solo biocombustible, sino también alimentos y cosméticos. A su vez, la compañía australiana Lucella recientemente informó sobre su nueva tecnología para transformar residuos agrarios en combustible gracias a la tecnología de reacción catalítica hidrotermal.

Viejo Condor
RT.news (SIC)

Rusia planea crear nuevo MBI de combustible líquido para burlar defensa antimisil de EEUU

Rusia planea desarrollar un nuevo misil balístico intercontinental de combustible líquido para poder burlar el futuro sistema estadounidense de defensa antimisil, comunicó hoy el teniente general Serguei Karakáiev, comandante de las Tropas rusas de misiles estratégicos (TME).
“Ya se ha tomado la decisión de crear un nuevo sistema de emplazamiento en silos con misil pesado de combustible líquido y tendrá mayor potencial para superar el futuro escudo antimisil de EEUU”, declaró Karakáiev.
Agregó que el nuevo misil va a reemplazar al famoso R-36M2 Voivoda que todo el mundo conoce bajo el nombre de SS-18 Satan, o Satanás.
El general no descartó que EEUU vaya a emplazar sus sistemas antimisiles en el espacio. Para Rusia “es más conveniente en esa situación crear un nuevo MBI que use combustible líquido y tenga al despegar una masa del orden de 100 toneladas”. La relación entre la carga útil y la masa al despegar en tales cohetes es mucho mejor que en los misiles similares de combustible sólido, dijo.
El nuevo misil pesado, según él, también ayudará a las TME a desarrollar “armas estratégicas de alta precisión con ojivas convencionales de alcance prácticamente global, a menos que EEUU renuncie a la creación de tales sistemas”.
Karakáiev aseguró que la presencia de modernos misiles en el arsenal de las TME subirá a un 60% para 2016 y a un 98% hacia 2021.
Siete de cada 10 misiles rusos han agotado su plazo de garantía a día de hoy. Sin embargo, al menos un 96% de los misiles en el arsenal del Ejército están listos para un uso inmediato, si es necesario.