Ciertos países miembros de la OTAN promueven la guerra civil en Libia al facilitar ayuda militar a uno de sus bandos, declaró este jueves el embajador de Rusia ante la Alianza, Dmitri Rogozin.
“Ciertos países de la Alianza Atlántica incurrieron de hecho en prestar ayuda militar directa a uno de los bandos enfrentados, y esto debe interpretarse como una ingerencia directa en la guerra civil de un tercer país”, opinó Rogozin en declaraciones a RIA Novosti.
A juicio del diplomático, ciertos países de la OTAN “interpretan completamente a su manera” la resolución 1973 del Consejo de Seguridad de la ONU que impuso una zona de exclusión aérea y autorizó una operación militar extranjera en Libia.
Las declaraciones del embajador ruso ante la OTAN se producen después de que el Estado Mayor del Ejército de Francia reconociera que aviones galos transportaron armas para los rebeldes libios.
Según informó anteriormente el diario Le Figaro, Francia facilita armamento de forma clandestina a tribus bereberes que habitan áreas montañosas al sur de Trípoli, desde mayo pasado, cuando aviones franceses comenzaron a lanzar material de guerra en paracaídas a lugares expresamente habilitados en las montañas de Nafusa.
De acuerdo con los datos del medio, estos “envíos” contienen lanzagranadas, misiles antitanque guiados, ametralladoras y fusiles.
La resolución 1973 fue aprobada por el Consejo de Seguridad de la ONU el pasado 17 de marzo. Dos días después, el 19 de marzo, contra el país norafricano comenzó una operación militar internacional que cuenta con la participación del Reino Unido, Francia, EEUU, Canadá, Bélgica, Italia, España, Dinamarca, Noruega y Qatar.
A finales de marzo, la OTAN asumió el mando de la operación, bautizada “Protector Unificado” cuyo objetivo, según se declara, es proteger a la población civil libia. El 1 de junio, la Alianza decidió prolongar su presencia en el país africano por 90 días como mínimo.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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