_-_Ultimas noticias- 20-6-12 -- Contra la desinformación __
La nueva escalada de tensiones en torno a Siria ha desatado una amplia campaña de desinformación contra la Marina de Guerra rusa. Algunos medios de comunicación llevan ya varios días informando de que Rusia ha enviado o se prepara para enviar a Siria sus buques de guerra con unidades de marines.
“El "Nikolái Filchenkov" zarpó rumbo a Siria con una compañía de marines y una unuidad de tanques”. “El "Cesar Kunikov" parte en la misma misión”. “El "Kaliningrado" navega a Siria con un cargamento desconocido”. “Rusia, Siria, Irán y China preparan maniobras conjuntas a gran escala en las aguas territoriales y el territorio de Siria”. Estas noticias y otras similares han plagado últimamente el espacio mediático mundial. Sus autores hacen vagas referencias a “fuentes competentes”, pero no reparan en publicar abiertas mentiras. El diario The Financial Times atribuye al portavoz de la Flota rusa del Mar Negro, capitán de navío Valentín Trujachov, y a la agencia Interfax, la noticia de que “ciento cincuenta marines y veinticinco tanques ya se encuentran a bordo de un gran buque anfibio ruso del Mar Negro” (aunque la infantería de marina rusa del Negro no dispone de tanques) y que “los buques serán enviados a Siria en caso de necesidad”.
Fue la secretaria de Estado de EEUU, Hillary Clinton, la que dió inicio a esta campaña al declarar que Rusia suministra nuevos helicópteros de combate a Siria, aunque se trataba de devolverle los aparatos antiguos fabricados en la Unión Soviética que habían sido enviados a Rusia para su reparación. El colmo fue el la noticia difundida por el canal de televisión Al-Arabiya, con referencia a la agencia informativa iraní Fars, sobre los preparativos para un ejercicio militar conjunto a gran escala con participacion de tropas rusas, chinas, sirias e iraníes, que supuestamente será el más importante de los que se hayan efectuado en Medio Oriente y conttará con la participación de noventa mil militares de las fuerzas terrestres, navales y aéreas. Más tarde, Al-Arabiya informó en su página web que Rusia y Siria desmintieron la respectiva información.
Las seudonoticias mencionan a barcos bien concretos. La información de que el "Cesar Kunikov" va rumbo a Siria apareció el 19 de junio. El 16 de junio el barco regresó a Sebastopol tras un viaje a Italia y el 19 de junio se hizo nuevamente a la mar. Los medios de comunicación se apresuraron a informar de que su nuevo destino es Siria, aunque en realidad el navío fue a medir radiodeviaciones y regresará al puerto a más tardar el 20 de junio.
El "Nikolái Filchenkov", que es otro “sospechoso”, permanece tranquilamente en el puerto y se ve desde la orilla. En todos estos días no se ha movido a ninguna parte.
La siguiente en la lista es la Flota del Báltico. La intención de viajar a Siria se le imputó al "Kaliningrado", que abandonó el puerto a primeras fechas de junio. Tras participar en los ejercicios internacionales BALTOPS 2012, el buque fue a Kiel para tomar parte en la tradicional Semana de Kiel. Tan pronto que termine este gran festival en la costa alemana del Báltico, el Kaliningrado volverá a Baltisk.
El canal Al-Arabiya metió la pata, al informar de que Rusia envió un portaaviones a Siria. El único portaaviones ruso "Almirante Kuznetsov", que regresó a finales de invierno de una larga navegación por las aguas del Atlántico y el Mediterráneo, se encuentra en su lugar habitual en la bahía de Kola, Mar de Barents, preparándose para un largo período de reparaciones.
Cabe señalar que los navíos rusos abandonan sus puertos con bastante frecuencia: sus planes de entrenamientos incluyen cientos de viajes en alta mar. ¿Será que ahora los medios van a hablar del envío de buques de guerra rusos a Siria cada vez que algo mayor que una lancha de remolque salga de su puerto de matrícula?
El Mediterráneo, y especialmente, su parte oriental, es un área de operaciones de la Flota rusa del Mar Negro. ¿Qué clase de misiones le toca realizar, si llega la orden de zarpar hacia Siria? Ese país está dentro de la órbita de los intereses de Rusia que hoy trata de impedir la injerencia externa en los asuntos sirios. Al estar en las aguas territoriales de Siria y la base de Tartus, los navíos rusos pueden convertirse en un factor importante para disuadir a la OTAN de intervenir a Siria: el posible conflicto con Rusia no es el precio que la Alianza esté dispuesta a pagar para dar solución al problema sirio.
Por último, el conflicto interno que se desarrolla en Siria puede amenazar a las instalaciones rusas en ese país aunque cuando no haya ninguna injerencia foránea. Se trata, entre otras obras, de la base naval de Tartus, que Rusia utiliza para el aprovisionamiento de sus barcos. Proteger la vida y la integridad del personal de la base es responsabilidad directa del Ministerio de Defensa de Rusia. Si se toma la respectiva decisión, la Marina de Guerra rusa está en condiciones para cumplirla.
Viejo Condor
La Voz de Rusia (SIC)
No hay comentarios:
Publicar un comentario