lunes, 10 de enero de 2011

El gobierno alemán castigará con dureza a los responsables de la contaminación alimentaria

“Los criminales pagarán caro lo que han hecho”, ha dicho el ministro federal de agricultura alemán, tras la contaminación de los huevos y la carne por dioxinas.

De las 4.700 granjas avícolas y porcinas que se cerraron tras destaparse el escándalo el miércoles pasado, 3.000 han vuelto a abrir este domingo.

La contaminación de los animales viene de la alimentación, de los piensos.

La organización Foodwatch, centrada en la protección de la calidad de los alimentos, ha apuntado que el problema es que muchas de las cosas que antes acababan en una incineradora, ahora terminan en la industria alimentaria.

La empresa Harles und Jentzsch, responsable de la contaminación, vendió a las granjas pienso fabricado con ácidos grasos de pésima calidad. Estas grasas contenían hasta 77 veces la concentración de dioxinas permitidas por la ley.

El gobierno de Alemania garantiza la exportación de sus alimentos pero asegura que, a partir de ahora, endurecerá los controles sobre los mismos.


Viejo Condor

La Voz de Rusia (SIC)

No hay comentarios: