El “oro negro” a debate: Cuba y Rusia en la búsqueda del tesoro
Empresas y gobiernos de todo el orbe se han dado cita en Moscú para debatir sobre uno de los más preciados recursos naturales, en el XXI Congreso Mundial de Petróleo.
Aunque el “oro negro” sigue siendo el rey, en los últimos tiempos ha ido perdiendo terreno entre otras fuentes de energía. El pasado año, ocupó apenas un 33 % entre los hidrocarburos. Pero lo cierto es que pasarán aún varios decenios antes de que se agoten las reservas mundiales (poco más de medio siglo, según vaticinan los especialistas) y mientras tanto, son muchos los que se interesan en encontrar nuevos yacimientos, en el uso de tecnologías modernas para su extracción, o en ampliar sus mercados.
Rusia –uno de los países líderes del sector, con el 12.9 % de la producción mundial– ha aprovechado este marco del Congreso para reforzar la cooperación bilateral con naciones como Venezuela y Cuba.
Eulogio del Pino, Vicepresidente de Exploración y Producción de Petróleos de Venezuela (PDVSA), quien se encuentra de visita en Moscú, no dudó en calificar de estratégica la colaboración técnica y financiera de Rusia con el país sudamericano, a través de las empresas Gazprom y Rosneft, que tienen inversiones allí. Más de un millón de barriles de petróleo deben ser producidos de forma conjunta en los próximos años.
Cuba, por su parte, sostiene desde hace un tiempo negociaciones con Rosneft y Zarubezhneft para continuar la prospección de las áreas ubicadas frente a las costas de Pinar del Río, donde se estima que hay más de 6 mil millones de barriles de petróleo, que podrían llegar incluso a 20 mil millones.
Las compañías petroleras rusas firmaron recientemente dos acuerdos de cooperación con su homóloga cubana Cubapetróleo (CUPET), en el Foro Económico Internacional de San Petersburgo, y en presencia del mismo presidente ruso Vladimir Putin.
Unos meses atrás, el presidente cubano Raúl Castro recibió en La Habana al presidente de Rosneft, Igor Ivánovich Sechin, durante su visita de trabajo a Cuba, en la que se sentaron las pautas para la construcción de una base logística en Zona Especial de Desarrollo del Mariel.
Preparando las maletas para el encuentro moscovita, Rafael Tenreyro Pérez, jefe de Grupo de Exploración de la Unión Cubapetróleo (CUPET), anunció que nuevas zonas de exploración se abrirán ahora a la inversión extranjera, en la parte central y oriental de los mares al norte del país hasta la frontera con Haití. Estas posibilidades han despertado el interés de unos cuantos entre los 5000 participantes procedentes de 80 países que asisten al más importante encuentro de la industria petrolera mundial.
Pero los rusos parecen llevar ventaja, con un camino ya andado en décadas de relaciones con La Habana. Podrían tener a su favor los 3 mil millones de dólares que aún Cuba debe pagar tras la reducción de un 90% de la deuda de la época soviética, cifra que –según algunas fuentes– debe ser invertida en la Isla, pero a nombre de Rusia.
Aunque de momento las perforaciones realizadas no han arrojado resultados tangibles, si por fin las petroleras rusas encuentran el “tesoro escondido”, Rusia volvería –de otra manera– a ocupar un lugar preponderante en la economía cubana.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
Natasha Vázquez
LA OPINIÓN DEL AUTOR NO COINCIDE NECESARIAMENTE CON LA DE RIA NOVOSTI