El Gobierno iraní considera que la reunión de este jueves uno de octubre con el Grupo 5+1 es "una prueba muy precisa para probar la honestidad de Occidente y su compromiso de cambiar" su política hacia Irán.
Teherán.- El Gobierno iraní quiere que la reunión que va a mantener este jueves en Ginebra con el Grupo 5+1 (Estados Unidos, Reino Unido, Francia, Rusia, China y Alemania) sirva para promover el "entendimiento" y la "cooperación" entre ambas partes, según afirmó este martes el asesor de prensa del presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad.
"Estas conversaciones entre Irán y las potencias mundiales pueden abrir una nueva ventana de entendimiento y cooperación basados en la justicia y la paz para ambas partes", dijo en un comunicado Alí Akbar Javanfekr, que destacó que el encuentro de Ginebra representa también "una oportunidad de oro y única" para el Gobierno estadounidense.
Javanfekr consideró que estas conversaciones son "una prueba muy precisa para probar la honestidad de Occidente y su compromiso de cambiar" su política hacia Irán. Después de la reunión "la pelota estará en el tejado de Occidente y, especialmente, en el de América", dijo.
Poco antes, el director de la Organización de la Energía Atómica iraní, Alí Akbar Salehi, dejaba claro que en el encuentro su país no discutirá ninguna cuestión relacionada con su "derecho" a desarrollar la energía nuclear, lo cual incluye todo lo referente a la nueva planta de enriquecimiento de uranio, situada en Qom, cuya existencia fue revelada por Teherán la semana pasada.
"No vamos a discutir nada que esté relacionado con nuestro derecho a la actividad nuclear, aunque sí podemos debatir sobre desarme, no proliferación y otros asuntos generales", declaró Salehi a la prensa. "La nueva planta es parte de nuestros derechos y no hay necesidad de discutir sobre ello", agregó. Teherán no abandonará sus actividades nucleares "ni un solo segundo", concluyó.
Estados Unidos y el resto de los países integrantes del Grupo 5+1 han indicado que en Ginebra se centrarán en la cuestión del programa nuclear iraní, del que sospechan que tiene fines militares y no pacíficos (para generar energía nuclear), como asegura la República Islámica.
Al anuncio de que Irán está construyendo una segunda central de enriquecimiento de uranio se suman los ensayos atómicos que llevó a cabo el país persa este domingo y ayer, hechos que han contribuido a aumentar la tensión. Salehi indicó que Teherán informará pronto a la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) del calendario para realizar la inspección de la nueva planta.
El director de la Organización de la Energía Atómica iraní, Alí Akbar Salehi, aseguró hoy que su país no discutirá ninguna cuestión relacionada con su "derecho" a desarrollar la energía nuclear, lo cual incluye todo lo referente a la nueva planta de enriquecimiento de uranio, durante el encuentro que mantendrán el próximo jueves en Ginebra sus representantes con los de los miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU más Alemania (Grupo 5+1).
"No vamos a discutir nada que esté relacionado con nuestro derecho a la actividad nuclear, aunque sí podemos debatir sobre desarme, no proliferación y otros asuntos generales", declaró Salehi a la prensa. "La nueva planta es parte de nuestros derechos y no hay necesidad de discutir sobre ello", agregó. Teherán no abandonará sus actividades nucleares "ni un solo segundo", concluyó.
Viejo Condor
Gaceta.es (SIC)