La Marina de Brasil planea contar con una flota de seis submarinos nucleares y 20 convencionales, que serán empleados para garantizar la defensa de las reservas gigantes de petróleo ante la amenaza de "agresores potenciales", explicó el comandante de esa fuerza, almirante Julio Moura Neto.
El Plan de Articulación y Equipamiento de la Marina prevé sumar los submarinos nucleares de aquí al 2047. Cada uno de ellos costará unos 550 millones de euros y serán construidos en astillero Itaguaí. Pero la tecnología se la venderá Francia.
El acuerdo con Francia contempla que el primer submarino atómico se los venderán ellos a 2.000 millones de euros, pero incluye la transferencia de tecnología del constructor naval francés DCNS. Para los demás, el costo será el de construcción en la nueva planta en Itaguaí, 80 km al suroeste de Río de Janeiro.
Con estas nuevas incorporaciones, la Armada brasileña tendrá la mayor fuerza de disuasión de América del Sur. "La defensa del área petrolera de pre-sal (aguas ultraprofundas) y la nueva posición de Brasil en el contexto internacional son factores que refuerzan la necesidad de la disuasión, nuestro país cuenta con 8.500 kilómetros de costas", explicó el almirante Neto Moura.
La petrolera estatal Petrobras descubrió yacimientos con un potencial superior a los 50.000 millones de barriles de petróleo en las cuencas de Santos y Campos, ubicadas en las costas de los estados de Sao Paulo y Río de Janeiro.
Según Moura Neto, la flota de "submarinos de ataque de propulsión nuclear tienen la capacidad de realizar ataques a múltiples blancos de un potencial agresor" que amenace los pozos ubicados en la plataforma continental.
Esas naves cuentan con gran "capacidad de ocultamiento" y de operar en mayores profundidades", además de desplazarse a "elevada velocidad por tiempo indeterminado posibilitando patrullar extensas áreas", agregó.
La primera unidad atómica, con tecnología aportada por Francia, podrá comenzar a navegar a fines de 2021, y los submarinos convencionales, que serán montados en Río de Janeiro, deben estar concluidos en 2016.
Las declaraciones del almirante Moura Neto ocurren dos meses después de la Presidencia de la República publicó un decreto por el cual se estableció que la zona de explotación exclusiva de petróleo se extenderá de 200 millas marinas a 350 millas marinas.
Esa decisión fue tomada con base en estudios geológicos realizados por la Marina con apoyo de Petrobras que demuestran la continuidad de la plataforma continental, según afirmó el ministro de Defensa Nelson Jobim.
Luego de cerrar un acuerdo con Francia para la adquisición de submarinos y tecnología naval en 2008, el gobierno del presidente Lula analiza actualmente un nuevo contrato para la compra de cazabombarderos franceses Rafale.
Es probable que la decisión sobre los aviones de guerra sea anunciada por Lula da Silva antes del fin su gobierno, el 31 de diciembre. Brasilia recibió tres propuestas, la del caza francés Rafale, el Super Hornet F18 estadounidense y el Gripen de fabricación sueca.
El ministro Nelson Jobim ya expresó su preferencia por las naves construidas por la empresa francesa Dassault. "En el caso de Francia la transferencia de tecnología tiene más credibilidad" que Estados Unidos, afirmó Jobim.
"No estamos sólo comprando los cazas, estamos comprando conocimiento, sin el conocimiento no hay negocio", aseguró Jobim, quien planteó sus reservas sobre los términos de negociación para la compra de aviones militares a Estados Unidos.
Viejo Condor
Clarin net (SIC)