Tipo | Misil balístico intercontinental |
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País de origen | Unión Soviética, Rusia |
Historia de producción | |
Diseñador | OKB-586 de V. F. Utkin |
Diseñada | 1969 |
Fabricante | Fábrica de Maquinaria de Yuzhny |
Especificaciones | |
Peso | 209,6 a 211,1 Tm |
Longitud | 33,6 a 37,25 m |
Diámetro | 3 m |
Alcance efectivo | De 9.250 a 16.000 km, según configuraciones |
Explosivo | De 1 termonuclear x 18-25 Mt hasta 10MIRV termonucleares entre 0,75 y 1 Mt. |
Motor | Propulsor de combustible líquido Viejo Condor |
Este es el blog DEMOSTENES,en recuerdo al general griego (no tiene vinculación con ningún web ni blog con similar nombre, ni tampoco con personas homónimas.Tiene fines didácticos, una sintética nota biográfica de Demóstenes y un busto en mármol que se encuentra en el Museo del Louvre. Yo soy el Viejo Cóndor, quien los llevará a través del tiempo y del espacio !!! Hasta pronto .... Disimular una falta con una mentira es reemplazar una mancha por un agujero. ARISTÓTELES .-
domingo, 14 de noviembre de 2010
DEMOSTENES: SS-18 Satan
Cosmonautas retirarán de la ISS un robot que lleva allí más de seis años
Los cosmonautas rusos Fiódor Yurchijin y Oleg Skrípochka, al salir al espacio extravehicular el 15 de noviembre, pondrán fin al experimento “Kóntur” de control remoto desde tierra de robots espaciales, informó hoy la oficina de prensa de la Agencia Aerospacial de Rusia, Roskosmos.
Según explicó a RIA Novosti el dirigente científico de ese experimento, Vladímir Zaborovski, la idea consistió en desarrollar robots espaciales controlados vía Internet.
El robot en cuestión fue llevado a la Estación Espacial Internacional (ISS) en 2003. Funcionó primero según el programa de la agencia espacial alemana DLR y luego en el marco del experimento ruso “Kóntur”. Al obedecer a las señales enviadas desde la Tierra, cumplía unas operaciones tecnológicas.
Zaborovski dijo también que el año que viene se realizará una operación de control de robots terrestres desde la estación espacial.
La salida al espacio de Fiódor Yurchijin y Oleg Skrípochka durará al menos seis horas el próximo lunes. Yurchijin, de 51 años, lo hará en quinta ocasión, y Skrípochka, por primera vez.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
Haití: los muertos por el cólera llegan casi al millar
El número de víctimas por la epidemia de cólera en Haití sobrepasó los 900, según informó el Ministerio de Salud de ese país.
La enfermedad está presente en seis de las 10 provincias haitianas y 14.642 personas han sido hospitalizadas desde el inicio del brote hace un mes.
Las agencias de ayuda están luchando por contener la propagación del cólera en la capital Puerto Príncipe, mientras aumenta el temor de que pueda difundirse entre los campamentos que alojan a más de un millón de sobrevivientes del terremoto de principios de año.
Naciones Unidas está pidiendo US$164 millones para enfrentar la enfermedad el año entrante.
La cuenta de víctimas ha subido en 121 desde el viernes.
La zona peor afectada continúa siendo la provincia central de Artibonita, donde 595 personas han muerto, según la más reciente actualización en la página internet del Ministerio de Salud haitiano.
Viejo Condor
BBC Mundo (SIC)
MOSCÚ SIGUE EN ESPERA DE UNA SOLUCIÓN A LOS ATASCOS DE TRÁFICO
“No aguanto más!”, “Entiérrenme aquí mismo!”, “Cariño, créame que estoy en el atasco solo y no con mi secretaria!” “¿Si hay chicas lindas menos de 25 años de edad?” “El gran maestro movió de e2 a e4”, “Señorita en el Suzuki, ¿un café?”, “¡Sigo avanzando por el puente desde hace dos horas!”, “Pensaba fumar porros en casa pero tendré que hacerlo ahora mismo”.
El servicio de información sobre la situación en las carreteras de la capital rusa de repente se convirtió en algo parecido a la red social Twitter un día de octubre pasado, día cuando miles de automovilistas de Moscú, en la desesperación de regresar pronto del trabajo a casa, trataban de encontrar cualquier remedio para evitar volverse locos de cansancio, de hambre o de desilusión.
auto.ru |
Una lluvia larga y accidentes de tránsito hicieron colapsar el centro de Moscú. Atascamientos sin precedentes se formaron cerca de las 5 de la tarde y miles de vehículos quedaron inmóviles en un radio de al menos 10 kilómetros a la redonda. Algunos de los conductores pasaron hasta 6 horas en aquellos atascos.
Buscando distraerse y acortar el tiempo en su poco envidiable situación, muchos se dedicaron a marcar el mapa electrónico de los atascos de Moscú con mensajes cortos a través de sus móviles.
Algunos de los mensajes se convirtieron en intercambios y hasta llevaron a resultados muy positivos. Por ejemplo, un hombre se quejó de que tenía mucha hambre y al señalar el número de matrícula de inmediato recibió un bocadillo de una chica que se ubicaba en un Mazda en el carril vecino.
Asimismo, las personas se dirigían al nuevo alcalde de Moscú para que se apresure con su compromiso de resolver el problema de la circulación en la ciudad, urbe que ya está al borde del total colapso.
La cantidad de vehículos registrados en Moscú excede los 3 millones y aumenta a un ritmo de 300.000 año a año. Además, cerca de 1,5 millones de coches visitan la capital a diario desde provincias.
auto.ru |
Hasta 800 atascos se forman en Moscú diariamente los que, en su totalidad, involucran a más de un millón de vehículos. Según un estudio realizado por la corporación IBM sobre la condición de tránsito, en las 20 mayores megalópolis del mundo Moscú está ubicada en el cuarto lugar por la cantidad de congestiones de tránsito, pero lidera por su duración.
La encuesta muestra que los moscovitas se llevan el récord por llegar tarde al trabajo a causa de los atascos. Los conductores pasan en promedio dos semanas por año en congestiones en la capital rusa, y más de 40% de los conductores encuestados han experimentado pasar más de 3 horas en un embotellamiento.
Es poco probable que las horas pasadas en atascamiento no estropeen el humor de los automovilistas. Es más, estar detenidos en atascos le causó ira a un 51% de los conductores y estrés a un 29%. Tal vez por eso los conductores moscovitas resultaron ser algunos de los más inamistosos del mundo, superados sólo por los de Pekín.
Los automovilistas moscovitas son agresivos y a veces hasta pueden armar una pelea si alguien les corta el paso.
No son sólo hombres quienes manifiestan síntomas de tal agresividad. En abril pasado, un accidente de tráfico produjo consecuencias absolutamente inesperadas: tras la colisión de dos coches, una conductora apuñaló a su oponente masculino en el vientre, le agarró las llaves de su automóvil y escapó en el vehículo del hombre dejando el suyo atrás.
“Con la descarada manera de conducir en Moscú y las diarias paradas en atascos uno puede acabar en un manicomio”, señaló una conductora.
La Academia Rusa de Transporte estima que cada auto que pasa una hora en un congestionamiento cuesta 500 rublos (16 dólares)al Estado; el daño financiero anual a las arcas fiscales suma 1.100 millones de dólares.
Al mismo tiempo, las congestiones son una fuente de ingresos avaluados en decenas de millones de dólares que reciben los servicios de Internet, empresas de ingeniería de software, operadores de comunicación móvil, propietarios de redes sociales y emisoras de radio, es decir, todos que ayudan a los automovilistas a "acortar" el tiempo u obtener información sobre cómo salirse de los atascos lo más rápido posible.
auto.ru |
Cabe mencionar que los atascos también vienen cambiando el modo de vida cotidiana de moscovitas y visitantes. Estos hacen que la gente de Moscú llegue hasta varias horas antes de la que empiezan su jornada de trabajo. Los primeros en responder a esta tendencia fueron algunos restaurantes y cafeterías que llegaron a abrirse al amanecer para ofrecer “desayunos de negocios” a los madrugadores.
Varios gimnasios tampoco pudieron desentenderse de esta ventaja potencial y, actualmente, cerca de una cuarta parte de sus clientes son madrugadores forzados.
Algunas compañías convierten a los coches de sus directivos en “oficinas sobre ruedas”: los equipan de televisores, Internet, butacas y tabiques de aislamiento del chofer, todo para que no "pierdan el tiempo" en los atascos.
Aunque la alcaldía de la ciudad está elaborando un completo paquete de medidas para reducir el peso de las congestiones sobre Moscú, sólo queda por adivinar si resultarán efectivas y oportunas o serán los mismos atascos los que vencerán en este enfrentamiento.
Viejo Condor
RT.net (SIC)
FREEGANISMO' ES UNA FORMA DE FILOSOFÍA Y POLÍTICA
Imagínense que al amparo de la noche un grupo de personas bien equipadas con mochilas grandes y antisépticos se acerca a los basureros, extrae productos alimenticios y huye. La situación sería normal si fueran vagabundos sin nada en la vida, pero sí que tienen trabajo, hogar y, en su mayoría, una buena educación. Sin embargo, cada día encuentran su desayuno, almuerzo y cena en los basureros… Son los freegans: comedores de basura.
En los últimos años en EE. UU. y Europa crece impetuosamente la cantidad de seguidores de este fenómeno puramente social, la búsqueda intencionada de comida en los basureros.
Intelectuales en los basureros: "El freeganismo es una filosofía"
El movimiento de freeganismo apareció en EE. UU. a finales de siglo XX. El término 'freegan' se compone de las palabras 'vegan', que significa 'vegetarianos', gente que rechaza el consumo de todo producto de origen animal, y 'free', que significa 'libre, gratis' -como liberación del consumismo-. Ser 'freegan' quiere decir oponerse a las principales características del estilo de vida 'civilizado'.
Cansados de ver cómo la sociedad occidental despilfarra toneladas de comida en buenas condiciones mientras que la otra mitad del mundo se muere de hambre, los 'freegans' usan solo lo que acabó en la basura y de este modo se niegan a participar en el consumo irreflexivo de bienes, propio de la humanidad en general. Las motivaciones para este estilo de vida son diferentes: unos acuden al 'freeganismo' por convicciones políticas; otros, ecológicas, y otros incluso religiosas.
"El 'freeganismo' es una filosofía... Creo en la fundación de unos nuevos y viables sistemas económicos cooperativos, creo en la resistencia contra la injusticia capitalista y, como consecuencia, la destrucción del capitalismo. Creo que la sociedad industrial será reemplazada por las comunidadaes, un modelo más cercano a las culturas 'primitivas': una vida dentro de las fronteras ecológicas, sin la producción industrial y sin la importación de los recursos", aclaró a RT la ideología de los freegans Adam Weissman, famoso activista de Nueva York y creador del sitio webwww.freegan.info.
Los activistas Jason Samuels (I), Adam Weissman (C) y Stephen Woloshin (D) encuentran la comida en basureros cerca de una tienda de Nueva York. AFP / Stan Honda |
Se considera antecesores de los 'freegans' a la organización Food Not Bombs (ver la entrevista de RT con Keith McHenry, uno de los fundadores del movimiento Food Not Bombs, aquí) y a lа banda de músicos callejeros Diggers, que existía en los años 60 en San Fransico y por principio no compraba comida y no usaba los servicios sociales pagados.
"La idea de que los 'freegans' son mártires que se comen las sobras es un mito absoluto"
Según un estudio de la Universidad de Arizona, diariamente cada estadounidense echa a la basura más de medio kilo de comida. En total, añadiendo también los supermercados, restaurantes y cafeterías, en EE. UU. anualmente se tiran productos por un precio total de unos 50.000 millones de dólares. El plazo de validez del 15% de estos productos todavía no ha caducado. En estas condiciones se puede suponer que los 'freegans' estadounidenses no sufren hambre. En la mayoría de los casos los 'freegans' buscan comida en los basureros de los restaurantes y supermercados. Habitualmente, los empleados de estos establecimientos empaquetan aparte los productos, cuyo plazo de caducidad está a punto de concluir.
"La idea de que los 'freegans' son mártires que se comen las sobras o la comida defectuosa es un mito absoluto. En realidad, la mayoría de los 'freegans' descubre que pueden alimentarse mucho mejor de lo que podría permitirse visitando los supermercados. Lleno mi frigorífico una vez por semana durante las expediciones de nuestros grupos. Cerca de los supermercados siempre encuentro muchos más productos que puedo utilizar. De hecho, tomo la cantidad que soy capaz físicamente de llevarme a casa", comenta Adam Weissman.
Cajas de fresas entre la basura en una calle de Nueva York. AFP / Don Emmert |
'El código de honor'
Los 'freegans' tienen su propio 'código de honor'. Así, a los participantes de este movimiento se les prohíbe llevarse de los basureros los documentos y papeles que puedan contener cualquier información confidencial, e interferir en la vida personal de la gente usando sus hallazgos. Ellos están obligados a mantener la limpieza cerca de los basureros y dejarlos en mejores condiciones de las que estaban antes de su visita. Los 'freegans' revuelven solo en los basureros de supermercados y viviendas de muchos pisos. Todo lo que acaba en la basura de patios interiores de las casas privadas no se utiliza.
Huertas urbanas y bicicletas en el futuro
Al mismo tiempo las comunidades de 'freegans' no solo 'encuentran' comida, sino que cultivan vegetales en sus propias huertas colectivas. De este modo regresan a las 'raíces', al estilo de vida comunero.
Además, el pensamiento 'freeganista' incentiva el uso de transporte ecológico e incluye una lista de prácticas no vinculadas con la alimentación: utilización de la energía solar, economía del agua, o reutilización y reciclaje de la basura. "Calificamos los automóviles y a la industria petrolera como un desastre, tanto social como ecológico, y ofrecemos métodos más viables para viajar. La bicicleta no contamina el medio ambiente y no es caro", afirma Weissman.
Las perspectivas del 'freeganismo' en Rusia
Un basurero en Rusia. AFP / Saul Loeb |
A pesar de la declaración de Keith McHenry en su entrevista a RT de que el 'freeganismo' "debe hacerse realidad para la mayoría de los ciudadanos del planeta", parece que pasará mucho tiempo hasta que la moda de este estilo de vida llegue a Rusia. Y no es por falta de detractores del sistema capitalista y el consumismo. La cuestión es que los contenedores de basura en Rusia tienen otro aspecto… mucho menos apetitoso. Los propietarios de restaurantes y supermercados no se apresuran a seleccionar cuidadosamente las mercancías caducadas y ponerlas en la calle. Eso podría ser una buena atracción para los vagabundos sin domicilio que, a su turno, pueden espantar a los clientes.
Además, los habitantes comunes y corrientes del país, que durante la dura y penosa historia de Rusia sobrevivieron a severas guerras y a hambrunas, tampoco suelen echar a la basura los productos que todavía se pueden utilizar. Al menos el capitalismo civilizado no ha invadido aún ese aspecto de la vida.
Viejo Condor
RT.net SIC)
EL TOPO RUSO, BAJO LA PROTECCIÓN DEL FBI
El efectivo ruso que denunció ante las autoridades norteamericanas la red de agentes de inteligencia rusa que actuaba en el territorio de EE. UU. está bajo la protección del FBI, (Oficina Federal de Investigación), según anunció hoy la cadena NBC.
Hace días en la prensa rusa apareció el nombre del presunto traidor que había suministrado los datos de los 12 agentes de inteligencia rusa en EE. UU., provocando así uno de los mayores escándalos de espías en la historia desde la Guerra Fría. Según el periódico Kommersant, el denunciante ha sido uno de los más altos cargos de los Servicios de Inteligencia de Rusia, el coronel Scherbakov.
Según informó en un programa de la cadena NBC el experto de Inteligencia estadounidense, David Wise, es una práctica habitual que el FBI asuma el cargo de proteger a un tránsfuga: "En cuanto un agente cambie a favor de EE. UU., desde luego empezamos a preocuparnos por su seguridad, los servicios especiales de EE. UU. saben actuar cuando se trata de darle un nuevo 'yo' a alguien".
NBC acentúa que las autoridades estadounidenses jamás comentaron oficialmente las versiones acerca de la identidad del 'traidor'. Wise, por su parte, precisó que es muy poco probable que en un caso así el nombre del denunciante sea declarado.
Viejo Condor
RT.net (SIC)
La NED, vitrina legal de la CIA
En 2006, el Kremlin denunciaba la proliferación en Rusia de asociaciones extranjeras, algunas de las cuales parecían estar participando en un plan tendiente a desestabilizar el país, plan orquestado por la estadounidense Fundación Nacional por la Democracia (National Endowment for Democracy – NED). En previsión de una «revolución de color», Vladislav Surkov elaboraba entonces una estricta reglamentación para esas «organizaciones no gubernamentales (ONG)». En Occidente, aquella reglamentación de orden administrativo fue descrita como un nuevo ataque del «dictador» Putin y de su consejero en contra de la libertad de asociación.
(Ver nuestra primera publicación respecto a la NED)
Otros Estados que también siguieron una política similar han sido igualmente calificados por la prensa internacional como «dictaduras».
El gobierno de Estados Unidos dice trabajar a favor de «la promoción de la democracia a través del mundo». Su posición es que el Congreso estadounidense puede subvencionar la NED y que la NED puede a su vez, de manera independiente, ayudar directa o indirectamente a asociaciones, partidos políticos o sindicatos en cualquier país del mundo. Al ser, como su nombre lo indica, «no gubernamentales», las ONGs pueden emprender iniciativas políticas que las embajadas no pueden asumir sin violar la soberanía de los Estados que las acogen. Esa es precisamente la cuestión.
¿La NED y la red de ONGs financiadas a través de ese órgano son acaso iniciativas de la sociedad civil injustamente reprimidas por el Kremlin o son en realidad pantallas de los servicios de inteligencia estadounidenses, sorprendidos en flagrante delito de injerencia?
Para responder esa interrogante nos remontaremos al origen de la National Endowment for Democracy y escrutaremos su funcionamiento. Para ello debemos analizar, primero que todo, lo que significa el proyecto oficial estadounidense de «exportación de la democracia».
¿Qué tipo de democracia?
Como pueblo, los estadounidenses asumen la ideología de sus padres fundadores. Se ven a sí mismos como una colonia llegada de Europa para fundar una ciudad que obedece a Dios. Ven a su propio país como «una luz encima de la montaña», según la expresión de San Mateo que la mayoría de los presidentes estadounidenses han retomado en sus discursos políticos a lo largo de dos siglos. Por lo tanto, Estados Unidos sería una nación modelo, que brilla en lo alto de una colina, iluminando el mundo. Y todos los demás pueblos de la Tierra deberían abrigar la esperanza de poder copiar ese modelo para alcanzar su propia salvación.
Para los estadounidenses, esa ingenua creencia implica –como una verdad que no necesita demostración– que su país es una democracia ejemplar y que ellos tienen el deber mesiánico de extenderla al resto del mundo. San Mateo predicaba que la propagación de la fe debía lograrse sólo mediante el ejemplo de una vida honesta, pero los padres fundadores de Estados Unidos veían el acto de encender su fuego y de propagarlo como un cambio de régimen. Los puritanos ingleses decapitaron a Carlos I de Inglaterra antes de huir hacia Holanda y América. Posteriormente, los patriotas del Nuevo Mundo rechazaron la autoridad del rey Jorge III de Inglaterra y proclamaron la independencia de los Estados Unidos.
Imbuidos de esa mitología nacional, los estadounidense no ven la política exterior de su propio gobierno como un imperialismo. Consideran que derrocar un gobierno es perfectamente válido si ese gobierno ambiciona encarnar un modelo diferente del estadounidense, lo cual lo convierte en un gobierno maléfico. Al mismo tiempo, están convencidos de que, debido a la misión mesiánica de la que están investidos, han logrado imponer la democracia por la fuerza en los países que han ocupado.
En las escuelas de Estados Unidos se enseña que los soldados estadounidenses llevaron la democracia a Alemania. Ignoran que los hechos históricos demuestran exactamente lo contrario: el gobierno estadounidense ayudó a Hitler a derrocar la República de Weimar y a instaurar un régimen militar para acabar con la Unión Soviética.
Esa ideología irracional les impide cuestionar la naturaleza de sus propias instituciones y lo absurdo del concepto mismo de «democracia forzosa». Sin embargo, según la fórmula del presidente Abraham Lincoln, «la democracia es el gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo».
Visto desde ese punto de vista, Estados Unidos no es una democracia sino un sistema híbrido en el que el poder ejecutivo está en manos de una oligarquía mientras que el pueblo limita la arbitrariedad [de esa oligarquía] a través de los contrapoderes legislativo y judicial.
En efecto, el pueblo elige a los miembros del Congreso y a algunos jueces pero son los Estados miembros de la federación los que eligen el poder ejecutivo, que a su vez designa a los altos magistrados. Si bien los ciudadanos están llamados a pronunciarse sobre la elección del presidente, el voto de la ciudadanía no es más que una consulta, como hubo de recordarlo la Corte Suprema a raíz de la elección presidencial del año 2000, al pronunciarse sobre el caso Gore vs. Bush. La Constitución de los Estados Unidos no reconoce la soberanía del pueblo ya que el poder se comparte entre el pueblo y los Estados que componen la federación, o sea los notables locales.
Es importante observar aquí, dicho sea de paso, que la Constitución de la Federación Rusa sí tiene un carácter democrático –por lo menos en el papel– ya que estipula: «El depositario de la soberanía y única fuente del poder en la Federación Rusa es su pueblo multinacional» (Título I, Capítulo 1, artículo 3). En base a ese contexto intelectual, los estadounidenses apoyan a su gobierno en su afirmación de que quiere «exportar la democracia» cuando su propio país no es una democracia, ni siquiera a la luz de su propia Constitución. Resulta difícil entender cómo podrían exportar lo que no tienen ni quieren tener en su propio país.
Durante los 30 últimos años, la NED ha sido portadora de esa contradicción, que se ha concretado en la desestabilización de numerosos Estados. Miles de crédulos militantes de ONGs han violado la soberanía de los pueblos con la beatífica sonrisa de quien tiene la conciencia tranquila.
Una Fundación pluralista e independiente
En su célebre discurso del 8 de junio de 1982 ante el parlamento británico, el presidente Reagan denunció la Unión Soviética como el «Imperio del Mal» y propuso prestar ayuda a los disidentes, en la URSS y en otras partes. «Se trata de ayudar a crear la infraestructura necesaria para la democracia: libertad de prensa, sindicatos, partidos políticos, universidades. Los pueblos serán así libres de escoger el camino que les convenga para desarrollar su cultura y resolver sus diferencias por medios pacíficos», declaró.
Basándose en ese consenso de lucha contra la tiranía, una comisión bipartidista de reflexión aconsejó a Washington la creación de la Fundación Nacional para la Democracia (NED), que sería instituida por el Congreso estadounidense en noviembre de 1983 y de inmediato recibiría financiamiento.
La NED subvenciona cuatro estructuras autónomas que se encargan de redistribuir en el exterior el dinero del que disponen entre asociaciones, sindicatos obreros y patronales así como partidos de derecha y de izquierda. Esas cuatro estructuras autónomas son:
El Instituto de Sindicatos Libres (Free Trade Union Institute – FTUI), hoy rebautizado como Centro Americano para la Solidaridad de los Trabajadores (American Center for International Labor Solidarity – ACILS), cuya gestión está en manos del sindicato obrero AFL-CIO;
El Centro para la Empresa Privada Internacional (Center for International Private Entreprise – CIPE), cuya gestión está en manos de la Cámara de Comercio de los Estados Unidos;
El Instituto Republicano Internacional (International Republican Institute – IRI), cuya gestión está en manos del Partido Republicano;
El Instituto Nacional Democrático de Asuntos Internacionales (National Democratic Institute for International Affairs – NDI), cuya gestión está en manos del Partido Demócrata.
Bajo esa presentación, la NED y sus cuatro tentáculos parecen estar basados en la sociedad civil y parecen reflejar además la diversidad social y el pluralismo político de esa misma sociedad civil. Financiados por el pueblo estadounidense, a través del Congreso, parecería que actúan a favor de un ideal universal, que son completamente independientes de la administración presidencial y que su accionar no puede servir de fachada a operaciones secretas al servicio de inconfesables intereses nacionales.
La realidad es muy diferente.
Un montaje de la CIA, el MI6 y el ASIS
El discurso de Ronald Reagan en Londres se produce después de los escándalos que rodearon las revelaciones de los manejos sucios de la CIA, revelaciones provenientes de varias comisiones investigadoras parlamentarias.
El Congreso prohibió entonces a la CIA la organización de nuevos golpes de Estado como medio de conquistar mercados. En la Casa Blanca, el Consejo de Seguridad Nacional busca entonces otras vías que le permitan sortear dicha prohibición.
La comisión bipartidista de reflexión se constituyó antes del discurso de Ronald Reagan, aunque el mandato oficial de la Casa Blanca sólo le fue entregado posteriormente. Ello indica que aquella Comisión no respondía a la pomposa ambición presidencial sino que era anterior. El discurso no es por lo tanto otra cosa que la justificación retórica de decisiones ya tomadas de antemano en líneas generales y destinadas a su puesta en escena por parte de la comisión bipartidista.
El presidente de la comisión bipartidista de reflexión era el representante especial de Estados Unidos para el Comercio, lo cual indica que el objetivo de dicha comisión no era precisamente promover la democracia sino, según la terminología consagrada, la promoción de la «democracia de mercado».
Este extraño término corresponde al modelo estadounidense: una oligarquía económica y financiera impone sus decisiones políticas a través de los mercados y del Estado federal, mientras que los parlamentarios y jueces electos por el pueblo protegen a los individuos de la arbitrariedad de la administración.
De los cuatro organismos periféricos de la NED tres fueron conformados para la ocasión. El cuarto, el organismo sindical (ACILS), no hubo que crearlo porque ya existía desde el fin de la Segunda Guerra Mundial, aunque había cambiado de nombre en 1978, cuando se descubrió que dependía de la CIA. Esto permite deducir que el CIPE, el IRI y el NDI no nacieron por generación espontánea, sino que también fueron creados bajo los auspicios de la CIA.
Además, a pesar de ser la NED una asociación creada conforme al derecho estadounidense no es un instrumento de uso exclusivo de la CIA sino un dispositivo común con los servicios británico (fue por eso que Reagan la anunció precisamente en Londres) y australiano. Esa característica fundamental nunca se menciona a pesar de estar enteramente confirmada por los mensajes de felicitación de los primeros ministros Tony Blair y John Howard en ocasión del vigésimo aniversario de la supuesta «ONG».
La NED y sus tentáculos son órganos del pacto militar anglosajón que vincula a Londres, Washington y Camberra, pacto en el que se incluye igualmente la red de intercepción electrónica Echelon. Además de la CIA, el MI6 británico y el ASIS australiano también pueden solicitar los servicios de ese dispositivo.
Para esconder esa realidad la NED ha propiciado la creación, por parte de varios aliados, de organizaciones análogas que trabajan con ella. En 1988, Canadá se dotó de un centro llamado Derechos & Democracia, que se concentró sobre todo en Haití y posteriormente en Afganistán. En 1991, el Reino Unido instituyó la Westminster Foundation for Democracy (WFD).
El funcionamiento de ese organismo público está diseñado según el modelo de la NED: su administración está en manos de los partidos políticos (consta de 8 delegados: 3 del Partido Conservador, 3 del Partido Laborista, uno del Partido Liberal y el octavo para los demás partidos representados en el parlamento británico). La WFD fue muy activa en Europa del Este.
Finalmente, en 2001 la Unión Europea se dotó del European Instrument for Democracy and Human Rights (EIDHR), que despierta menos sospechas que sus homólogos. Ese órgano depende de EuroAid, dirigida por un alto funcionario tan poderoso como desconocido, el holandés Jacobus Richelle.
La directiva presidencial 77
Cuando votaron la fundación de la NED, el 22 de noviembre 1983, los miembros del Congreso de los Estados Unidos ignoraban que aquella organización ya existía en secreto, en virtud de una directiva presidencial fechada el 14 de enero.
Aquel documento, que no fue desclasificado hasta 20 años más tarde, organiza la «diplomacia pública», expresión políticamente correcta para designar la propaganda. Instituye además en la Casa Blanca varios grupos de trabajo dentro del Consejo de Seguridad Nacional, uno de ellos encargado de pilotear la NED.
El consejo de administración de la NED no es por lo tanto otra cosa que una correa de transmisión del Consejo de Seguridad Nacional. En aras de salvar las apariencias, se decidió que, de manera general, los agentes o ex agentes de la CIA no podían figurar en el consejo de administración.
A pesar de lo anterior, las cosas no pueden estar más claras. La mayoría de los altos funcionarios que han desempeñado un papel central en el Consejo de Seguridad Nacional han sido administradores de la NED. En ese caso se encuentran, por ejemplo, Henry Kissinger, Franck Carlucci, Zbigniew Brzezinski y Paul Wolfowitz, personalidades que la Historia no recordará precisamente como idealistas de la democracia sino como estrategas cínicos de la violencia.
El presupuesto de la NED no puede ser interpretado de manera aislada ya que esa institución recibe además instrucciones del Consejo de Seguridad Nacional para la realización de acciones que se inscriben en el marco de grandes operaciones en las que participan varias agencias.
Existen fondos, provenientes esencialmente de la Agencia Estadounidense de Ayuda Internacional (USAID), que transitan por la NED sin aparecer en su presupuesto, simplemente para darles un carácter «no gubernamental». Además, la NED recibe indirectamente el dinero de la CIA, previamente blanqueado por intermediarios privados como la Smith Richardson Foundation, la John M. Olin Foundation o la Lynde and Harry Bradley Foundation.
Para evaluar la verdadera envergadura de ese programa habría que añadir al presupuesto de la NED los subpresupuestos correspondientes del Departamento de Estado, de la USAID, de la CIA y del Departamento de Defensa, lo cual resulta hoy en día imposible.
Ciertos elementos conocidos permiten sin embargo hacerse una idea de su importancia. En los últimos 5 años, Estados Unidos gastó más de 1 000 millones de dólares en asociaciones y partidos únicamente en el Líbano, pequeño Estado de 4 millones de habitantes. Globalmente, la mitad de esa suma la distribuyeron públicamente el Departamento de Estado, la USAID y la NED. La otra mitad fue entregada secretamente por la CIA y el Departamento de Defensa.
Este ejemplo permite deducir que el presupuesto general que Estados Unidos dedica a la corrupción institucional se cuenta en decenas de miles de millones al año. En todo caso, el programa equivalente de la Unión Europea, que tiene un carácter enteramente público y sirve de apoyo a las acciones estadounidenses, es de 7 000 millones de euros al año.
En definitiva, la estructura jurídica de la NED y el volumen de su presupuesto oficial no son más que apariencia. En esencia, la NED no es un organismo independiente a cargo de acciones legales que anteriormente realizaba la CIA sino una vitrina que el Consejo de Seguridad Nacional utiliza para garantizar los aspectos legales de operaciones ilegales.
La estrategia trotskista
Durante su etapa de instauración (en 1984), la NED tuvo como presidente a Allen Weinstein. John Richardson ocupó después ese puesto durante 4 años (desde 1984 hasta 1988) y fue finalmente reemplazado por Carl Gershman (desde 1998).
Los tres tienen tres cosas en común. Son judíos, fueron miembros del partido trotskista Social Democrats USA y trabajaron en la Freedom House. Todo eso tiene su lógica. El odio al estalinismo llevó a algunos trotskistas a unirse a la CIA para luchar contra los soviéticos. Y llevaron a la CIA la teoría de la toma del poder a escala mundial, transponiéndola a las «revoluciones de colores» y la «democratización». Simplemente desplazaron la doctrina trotskista aplicándola al combate cultural analizado por Antonio Gramsci: el poder se ejerce en las mentes más que por la fuerza. Para gobernar a las masas, una élite tiene que inculcarles primero una ideología que las programe para que acepten el poder que las domina.
El Centro Americano para la Solidaridad de los Trabajadores (ACILS)
Conocido con el nombre de Solidarity Center, el ACILS, rama sindical de la NED, es de lejos su principal canal. Distribuye más de la mitad de las donaciones de la NED, sustituyó organismos anteriores que habían trabajado durante toda la guerra fría en la estructuración de sindicatos no comunistas a través del mundo, desde Vietnam hasta Angola pasando por Francia y Chile.
La utilización de sindicalistas para encubrir ese programa de la CIA entraña de por sí una excepcional perversión. Lejos de la divisa marxista «Proletarios de todos los países, ¡uníos!», el ACILS asocia los sindicatos obreros estadounidenses con el imperialismo que reprime a los trabajadores de los demás países.
Esa filial estuvo bajo la dirección de un personaje singular, Irving Brown, desde 1948 hasta el fallecimiento de este último en 1989.
Algunos autores aseguran que Brown era hijo de un ruso blanco cercano a Alexander Kerensky. Lo que sí está comprobado es que Brown fue agente del OSS, el servicio de inteligencia estadounidense, durante la Segunda Guerra Mundial y que participó en la creación de la CIA y del Gladio, la red secreta de la OTAN, pero se negó a asumir la dirección porque prefería concentrarse en su especialidad: los sindicatos.
Tuvo su base en Roma y posteriormente en París, no en Washington, lo que le proporcionó especial influencia en la vida pública de Italia y Francia. Al final de su vida, Brown se jactaba de haber dirigido siempre –por debajo de la mesa– el sindicato francés Force Ouvriere, de haber manipulado los hilos del sindicato estudiantil francés UNI (en cuyo seno militaron Nicolas Sarkozy y sus ministros Francois Fillon, Xavier Darcos, Hervé Morin y Michele Alliot-Marie, así como el presidente de la Asamblea Nacional Bernard Accoyer y el presidente de la mayoría parlamentaria Jean-Francois Copé) y de haber formado personalmente, en el sector de izquierda, a los miembros de un grupúsculo trotskista, como Jean-Christophe Cambadelis y el futuro primer ministro francés Lionel Jospin.
A fines de los años 1990, los miembros de la confederación AFL-CIO pidieron cuentas sobre las verdaderas actividades del ACILS, cuya naturaleza criminal en numerosos países ya había sido por entonces ampliamente documentada. Cualquiera creería que las cosas cambiaron después de aquel escándalo. Pero no fue así. En 2002 y 2004, el ACILS participó activamente en el fallido golpe de Estado perpetrado en Venezuela contra el presidente Hugo Chávez y en el exitoso derrocamiento del presidente Jean-Bertrand Aristide en Haití.
El ACILS se encuentra actualmente bajo la dirección de John Sweeney, ex presidente de la confederación AFL-CIO, otro personaje proveniente del partido trotskista Social Democrats USA.
El Centro para la Empresa Privada Internacional (CIPE)
El Centro para la Empresa Privada Internacional (CIPE) se concentra en la difusión de la ideología capitalista liberal y la lucha contra la corrupción.
El primer éxito del CIPE fue la transformación, en 1987, del European Management Forum –un club de grandes patronos europeos– en World Economic Forum –el club de la clase dirigente transnacional. El gran encuentro anual de la aristocracia económica y política global en la estación de esquí suiza de Davos contribuyó a forjar un sentido de pertenencia clasista, más allá de las identidades nacionales de los participantes.
El CIPE es muy cuidadoso en cuanto a no tener ningún vínculo de tipo estructural con el Foro de Davos, razón por la cual resulta imposible –al menos por el momento– probar que World Economic Forum esté siendo manejado por la CIA. Les costaría, sin embargo, mucho trabajo a los dirigentes de Davos explicar por qué ciertos líderes políticos han escogido su Forum Económico como escenario de acontecimientos de la más alta importancia si no se tratara de operaciones planificadas por el Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Por ejemplo, en 1988, fue en Davos, no en la ONU, donde Grecia y Turquía hicieron las paces. En 1989, fue en Davos donde las dos Coreas, por un lado, y las dos Alemanias, por el otro, realizaron su primera cumbre a nivel ministerial, en el caso de las primeras, y su primera cumbre sobre la reunificación alemana. En 1992, fue también en Davos donde Frederik de Klerk y Nelson Mandela presentaron juntos –por primera vez fuera de Sudáfrica– su proyecto común para aquel país. Más increíble aún, fue en Davos, en 1994, después del Acuerdo de Oslo, que Shimon Peres y Yaser Arafat negociaron y firmaron su aplicación en Gaza y Jericó.
El vínculo entre el Foro Económico de Davos y Washington pasa evidentemente por Susan K. Reardon, ex directora de la asociación profesional de empleados del Departamento de Estado convertida en directora de la Fundación de la Cámara de Comercio de Estados Unidos, órgano encargado de la administración del CIPE.
El otro éxito del Centro para la Empresa Privada Internacional es Transparency International. Esta «ONG» fue creada oficialmente por un oficial de la inteligencia militar estadounidense, Michael J. Hershman, quien es por demás administrador del CIPE y, hoy en día, uno de los responsables del reclutamiento de informantes para el FBI así como presidente-director general de la agencia privada de inteligencia Fairfax Group.
Transparency International es ante todo una fachada para las actividades de la CIA en materia de inteligencia económica. Es también un instrumento de comunicación utilizado para obligar a otros Estados a modificar sus legislaciones de forma favorable a la apertura de sus propios mercados.
Para esconder el origen de Transparency International, el CIPE recurrió a las habilidades del ex director de prensa del Banco Mundial, el neoconservador Frank Vogl. Este último instauró un Comité de personalidades que contribuyó a crear la imagen de que se trataba de una asociación proveniente de la sociedad civil. Este comité de fachada está bajo la dirección de Peter Eigen, ex director del Banco Mundial en el este de África. En 2004 y 2009, la esposa de Eigen fue candidata a la presidencia de la República Federal de Alemania por el SPD.
La actividad de Transparency International favorece los intereses de Estados Unidos y no es en lo absoluto confiable. En 2008 esta seudo ONG denunciaba la corrupción de PDVSA, la empresa estatal del petróleo de Venezuela. Basándose en información falsificada, Transparency International situaba a PDVSA en la última posición de la clasificación mundial de empresas estatales.
El objetivo era evidente: sabotear la reputación de una empresa que sirve de base económica a la política antiimperialista del presidente venezolano Hugo Chávez. Al ser sorprendida en flagrante delito de intoxicación, Transparency International se negó a contestar las preguntas de la prensa latinoamericana y a modificar su propio informe. Lo cual no tiene en definitiva nada de sorprendente si recordamos que el corresponsal del CIPE en Venezuela, Pedro Carmona, fue precisamente el personaje que Estados Unidos puso en el poder –donde no logró mantenerse– durante el fallido golpe de Estado contra Hugo Chávez.
En cierta forma, al dirigir la atención de los medios de difusión hacia la corrupción económica, Transparency International enmascara la actividad de la NED, que se dedica a la corrupción políticas de las élites dirigentes en beneficio de los anglosajones.
El Instituto Republicano Internacional (IRI) y el Instituto Nacional Democrático de Relaciones Internacionales (NDI)
El Instituto Republicano Internacional (IRI) tiene la misión de corromper a los partidos de derecha mientras que el Instituto Nacional Democrático de Relaciones Internacionales (NDI) se ocupa de los partidos de izquierda. El primero tiene como presidente a John McCain y el segundo a Madeleine Albright. Estos dos personajes no deben por lo tanto ser considerados políticos normales o como un líder de oposición y una sabia retirada, sino como activos responsables de programas del Consejo de Seguridad Nacional.
Tanto el IRI como el NDI han renunciado a tratar de controlar la Internacional Liberal y la Internacional Socialista como vía para ejercer su control sobre los principales partidos políticos del mundo. En vez de ello han preferido crear organizaciones rivales: la Unión Democrática Internacional (IDU) y la Alianza de los Demócratas (AD). La primera tiene como presidente al australiano John Howard, con el ruso Leonid Gozman de Justa Causa (Правое дело) como vicepresidente. La segunda se encuentra bajo la dirección del italiano Gianni Vernetti, quien tiene como copresidente al francés Francois Bayrou.
El IRI y el NDI se apoyan también en las fundaciones políticas vinculadas a los grandes partidos europeos (6 en Alemania, 2 en Francia, una en Holanda y otra en Suecia). Por otro lado, algunas operaciones se realizan a través de misteriosas empresas privadas, como Democracy International Inc. que organizó las más recientes elecciones “arregladas” en Afganistán.
Todo esto deja un gusto amargo. Estados Unidos ha logrado corromper la mayoría de los grandes partidos políticos y sindicatos de todo el mundo.
La «democracia» que Estados Unidos promueve consiste en definitiva en discutir cuestiones locales en cada país –incluso simples temas sociales, como los derechos de las mujeres o de los homosexuales– mientras se alinean con Washington en todas las cuestiones internacionales.
Las campañas electorales se han convertido en espectáculos en los que la NED escoge a los actores mediante la entrega –a unos sí y a otros no– de los recursos financieros que necesitan. La noción misma de alternancia ha perdido su verdadero sentido ya que la NED promueve alternativamente uno u otro bando con tal de que ambos mantengan la misma política exterior y de defensa. Tanto en la Unión Europea como en otras partes se escuchan hoy lamentos sobre la crisis de la democracia. Y los responsables de esa crisis son, evidentemente, la NED y Estados Unidos. ¿Cómo puede calificarse, en todo caso, un régimen como el de Estados Unidos, cuyo principal líder de oposición, John McCain, es en realidad empleado del Consejo de Seguridad Nacional? Ciertamente no como democracia.
Balance de un sistema
Con el tiempo, la USAID, la NED, sus institutos satélites y sus fundaciones intermedias han dado lugar a la aparición de una burocracia tan extensa como avariciosa. La votación sobre el presupuesto de la NED da lugar, año tras año, a ásperos debates sobre la ineficacia de ese sistema tentacular y los rumores de malversación de fondos en beneficio de personalidades políticas estadounidenses encargadas de administrar dichos fondos.
Con ánimo de mejorar la gestión, se han realizado numerosos estudios tendientes a medir el impacto de esos flujos financieros. Expertos han comparado las sumas destinadas a cada país con la calificación democrática de esos mismos países que otorga la Freedom House. Y han calculado después cuántos dólares por habitante había que gastar para que la calificación de un país subiera un punto.
Lo anterior no es, por supuesto, otra cosa que un intento de autojustificación. La idea de otorgar calificaciones en materia de democracia nada tiene de científica. De forma totalitaria, se parte del principio que sólo existe una forma de instituciones democráticas. Y, de manera infantil, se establece una disparatada lista de criterios a los que se atribuyen coeficientes imaginarios para convertir la complejidad social en una cifra única.
El resultado es que la gran mayoría de esos estudios muestran el fracaso: aunque la cantidad de democracias aumente en el mundo, no parece existir relación alguna entre los progresos o retrocesos democráticos y las sumas que gasta el Consejo de Seguridad Nacional.
Esto confirma, por el contrario, que los objetivos reales nada tienen que ver con los objetivos oficialmente anunciados. Los responsables de la USAID citan, sin embargo, un estudio de la universidad Vanderbilt que afirma que sólo las operaciones de la NED cofinanciadas por la USAID han sido eficaces, ya que la USAID tiene una administración rigurosa de su presupuesto. Por supuesto, este singular estudio fue financiado por… la USAID.
En todo caso, en 2003, en ocasión de su vigésimo aniversario, la NED hizo un balance político de su acción. Según ese balance, la NED financiaba en aquel momento más de 6 000 organizaciones políticas y sociales en todo el mundo, cifra que ido en aumento desde aquel entonces. La NED reconocía entonces haber creado enteramente el sindicato Solidarnorsc en Polonia, la Carta de los 77 en Checoslovaquia y Otpor en Serbia. Se felicitaba por haber creado también enteramente la radio B92 y el cotidiano Oslobodjenje en la antigua Yugoslavia así como gran cantidad de medios de difusión independientes en el Irak «liberado».
Cambiar de fachada
Luego de haber registrado un éxito mundial, la retórica de la democratización ya no convence a nadie. El presidente George W. Bush la desgastó al abusar de su uso. Nadie puede afirmar seriamente que las subvenciones que distribuye la NED harán desaparecer el terrorismo internacional. Como tampoco es posible afirmar ahora que las tropas estadounidenses derrocaron a Sadam Husein para ofrecer la democracia a los iraquíes.
Además, los ciudadanos que en el mundo entero militan a favor de la democracia son ahora más desconfiados. Han entendido que la ayuda que ofrecen la NED y sus sucursales sirve en realidad para manipularlos a ellos y a sus países. Se niegan, por lo tanto, cada vez más a menudo a aceptar las donaciones «desinteresadas» que estas les proponen. Así que los responsables estadounidenses de los diferentes canales de corrupción estudian cómo cambiar nuevamente de fachada.
Después de los sucios manejos de la CIA y la transparencia de la NED, apuntan ahora hacia la creación de una nueva estructura que vendría a reemplazar un conjunto ya desacreditado.
Esa estructura ya no estaría en manos de los sindicatos, del patronato y de los dos grandes partidos políticos estadounidenses sino de multinacionales concebidas según el modelo de la Asia Foundation.
En los años 1980, la prensa reveló que la Asia Foundation era una fachada de la CIA para la lucha contra el comunismo en Asia. Hubo entonces una reforma de la fundación y su administración fue puesta en manos de varias transnacionales (Boeing, Chevron, Coca-Cola, Levis Strauss, etc…). Aquel cambio de apariencia bastó para proporcionar un aspecto no gubernamental y respetable a una estructura que nunca dejó de estar al servicio de la CIA.
Después de la disolución de la URSS, se creó también la Eurasia Foundation, cuya misión consistiría en extender la acción secreta a los nuevos Estados asiáticos.
Otra discutida cuestión es la de saber si las donaciones para la «promoción de la democracia» deben adoptar únicamente la forma de contratos para la realización de determinados proyectos o la de subvenciones sin obligación de resultados. La primera fórmula ofrece mejor cobertura jurídica, pero la segunda es mucho más eficaz como estrategia de corrupción.
Ante tal panorama, la exigencia de Vladimir Putin y de Vladislav Surkov en cuanto a reglamentar el financiamiento de las ONGs que operan en Rusia es enteramente legítima, por muy exagerada y extremadamente meticulosa que sea la burocracia que hayan establecido para ello.
El dispositivo de la NED, instaurado bajo la autoridad del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos, no sólo está lejos de favorecer los esfuerzos democráticos en el mundo, sino que además los envenena.
Viejo Condor
Voltaire.org.net (SIC)
Analista político francés. Fundador y presidente de la Red Voltaire y de la conferencia Axis for Peace. Última obra publicada en español: La gran impostura II. Manipulación y desinformación en los medios de comunicación (Monte Ávila Editores, 2008).
Fuente Odnako (Russia)