La potente explosión del lunes en el metro de la capital de Bielorrusia, Minsk, se ha llevado la vida de 11 personas y ha dejado un centenar de heridos, según los datos preliminares aportados por las autoridades del país.
El atentado ha sorprendido profundamente a la sociedad del país, hasta ahora inmune a los ataques terroristas. Los testigos de la tragedia han contado a los medios rusos y bielorrusos qué pasó en los primeros minutos después del estallido.
"Vi a la gente sin piernas ni brazos, en el suelo había sangre"
"La explosión se produjo cuando el tren se acercaba a la estación Oktiábrskaya de la parada Plóshad Pobedi. De repente se oscureció y el tren se paró. Vi a la gente sin piernas ni brazos, en el suelo había sangre. Muchos temblaban", dijo un joven testigo.
Muchos testigos afirmaron que varias personas fueron víctimas del repentino derrumbe de la escalera mecánica, además se apagaron las lámparas de la estación, lo que desató el pánico entre los viajeros.
"Salí del último vagón en la estación Oktiábrskaya y me dirigí a la escalera mecánica. Al subir al primer escalón, algo estalló debajo de la escalera. Uno de los trozos hizo que se me cayera el bolso al suelo. Muchas personas se incendiaron literalmente, otras intentaban apagarlas", contó otra testigo al medio ruso RBK.
"Yo estaba en la escalera mecánica cuando se produjo la explosión. Pensé que se había derrumbado el techo. Giré la cabeza para ver qué pasó, pero todo estaba lleno de polvo y no se veía nada. Oí cómo la policía pidió a todos que salieran del metro, luego vi a una mujer con la cabeza ensangrentada, en la calle nos esperaba la policía y los coches de ambulancia", comentó Eugenia, que presenció la tragedia. Otro testigo, Serguéi Sájarov, contó que al estallar la bomba "del lado de la escalera mecánica volaron unos trozos de color negro y apareció humo espeso. Al cabo de un segundo ya no se veía el torniquete. Luego, de ambas líneas del metro corría la muchedumbre".
"Escuché un sonido parecido a cuando se abre una botella de champán. Entonces, saltaron por los aires los cristales de las ventanas del vagón y comenzó a salir mucho humo. Nos asustamos, ya que pensamos que nos asfixiaríamos", declaró otro testigo a la agencia rusa Interfax.
¿El explosivo estaba en un vagón?
La cadena televisiva local ONT comunica, basándose en los datos de los servicios de seguridad de Minsk, que la explosión se produjo en el segundo vagón y tuvo tanta potencia que se derrumbaron parcialmente los muros y la escalera mecánica en unas tres decenas de metros. Un viajero declaró que el estallido se produjo cerca del tercer vagón del tren. Mientras él subía por la escalera, vio cómo empezó a salir fuego del andén. "Vi el fuego, el humo y cómo volaba la gente. Era hora punta, en ese momento hay alrededor de 300 personas en el subterráneo, y justo explotó todo".
Al mismo tiempo según los testigos, en el lugar de la explosión apareció un agujero de 1,5 metros de anchura. Estos datos no concuerdan con la suposición de que la bomba estaba en el vagón.
El presidente de Bielorrusia, Alexánder Lukashenko, convocó una reunión urgente tras la explosión donde consideró lo sucedido como "un reto muy serio" que requiere una respuesta adecuada. "El secretario estatal del Consejo de Seguridad del Ministerio de Exteriores debe reforzar al máximo las medidas de seguridad", ha declarado Lukashenko. Por su parte, Rusia ha ofrecido al líder de Bielorrusia su ayuda en la investigación de la tragedia. Los especialistas rusos podrían llegar al país en unas horas. La Fiscalía General de Bielorrusia ha calificado la explosión en el metro de Minsk como un atentado.
Viejo Condor
RT.net (SIC)