Ígor Sechin
La empresa rusa Rosneft y la estadounidense ExxonMobil prevén construir de mancomún en la isla de Sajalín, Lejano Oriente ruso, una planta de gas natural licuado y ampliar el sistema de trasiego existente, informó hoy el jefe de Rosneft, Ígor Sechin.
“La puesta en explotación de la planta está prevista para finales de 2018. El costo estimativo de la primera fase del proyecto es de 12.000 millones de dólares”, dijo Sechin en una reunión con el primer ministro ruso Dmitri Medvédev.
Anteriormente, Rosneft valoró las obras en unos 6.500–8.000 millones de dólares. En abril de 2013, ExxonMobil dio la cifra de 15.000 millones de dólares, al incluir gastos de infraestructura.
Más tarde, Rosneft pidió a la compañía Sakhalin Energy, operadora del proyecto Sakhalin 2, permitirle usar la infraestructura existente para trasegar gas a la planta proyectada, lo que abarataría los gastos.
El nuevo proyecto, llamado “Gas Licuado del Lejano Oriente”, usará como fuente de materia prima la plataforma continental del mar de Ojotsk.
Hace un tiempo, el monopolio ruso Gazprom expresó dudas sobre la conveniencia de construir otra planta de gas natural licuado en Sajalín.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)