El presidente saliente de EEUU, George W. Bush, califica de "chistoso" el incidente de los zapatos que le ocurrió la víspera durante una rueda de prensa en Bagdad.
Uno de los reporteros iraquíes que asistieron a la conferencia conjunta de Bush y del primer ministro de Iraq, Nuri al Maliki, se quitó inesperadamente un zapato y lo arrojó contra el mandatario estadounidense, al gritar que era "un beso de despedida para el perro". Un instante después, lanzó en la misma dirección el segundo zapato, "por parte de las viudas, los huérfanos y todas las víctimas iraquíes". En ambos casos, Bush demostró tener reflejos envidiables para esquivar el golpe, así que los zapatos impactaron en una pared cerca de la cual estaban las banderas de Iraq y EEUU.
"Fue chistoso", señaló Bush en una entrevista a la cadena de televisión estadounidense ABC. El presidente confesó o haber visto "un montón de cosas raras" durante su gobierno pero admitió que el episodio de los zapatos fue "uno de los más raros".
También aseguró que no guarda rencor al Gobierno iraquí a raíz de lo sucedido ni se siente insultado por el incidente, a pesar de que en el mundo árabe es una falta de respeto muy grave llamar "perro" a una persona y arrojarle zapatos.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)