La cantidad total de óxido carbónico (CO) en la atmósfera sobre el territorio europeo de Rusia, con miles hectáreas de bosques y campos turbosos azotadas por las llamas, aumenta diariamente en 700 mil toneladas según los datos suministrados por la sonda infrarroja AIRS (Atmospheric Infrared Sounder) instalada a bordo del satélite Aqua de la NASA.
Según ha informado este domingo el Laboratorio de Propulsión a Chorro (JPL) de esta agencia espacial, para el primero de agosto de este año la masa total de óxido cabónico sobre Rusia habrá superado los 15 millones de toneladas y se habrá acercado al máximo récord de 2002, año en que también fueron registrados muchos incendios de turba.
“De acuerdo con las estimaciones de la NASA, para el 4 de agosto el manto de humo se habrá extendido a unos tres mil kilómetros de Este a Oeste, lo que aproximadamente equivale a la distancia de San Francisco a Chicago”, señaló el comunicado de la agencia.
Según los datos de AIRS que monitorea la concentración de óxido carbónico a alturas entre 2 y 10 kilómetros, se ha registrado un considerable aumento de este compuesto en las partes occidental y europea de Rusia en una altura de unos 5,5 kilómetros. Los científicos advierten que a estas alturas la contaminación es capaz de ser trasladada a grandes distancias. Según información del pasado sábado, los satélites de la NASA Tierra y Aqua han registrado 564 focos de incendios en el territorio ruso.
Mientras tanto, según los informes del Ministerio de Situaciones de Emergencia ruso, en las últimas 24 horas han surgido 270 incendios forestales y dos de turba.
Actualmente, para las 14:40 horas, la concentración de óxido carbónico en Moscú supera en 3,1 veces el límite admisible.
Viejo Condor
RT.net (SIC)