sábado, 15 de noviembre de 2008
BUSH ALERTO CONTRA EL PROTECCIONISMO
La cumbre arrancó con una primera intervención del presidente de EE.UU, George W. Bush, que alertó contra la adopción de medidas proteccionistas.
En unas declaraciones al comenzar la reunión de las principales economías desarrolladas y en desarrollo, Bush se declaró "complacido" con los progresos alcanzados para atajar la crisis financiera y para trazar medidas que impidan que se repita.
El presidente también expresó su satisfacción porque los líderes que participan en la cumbre han "reafirmado los principios que respaldan la apertura de mercados y el libre comercio".
"Uno de los peligros en una crisis como ésta es que la gente empiece a poner en marcha políticas proteccionistas", declaró. Bush advirtió de que la crisis "no ha acabado" y agregó que, aunque se han logrado algunos progresos, "aún queda mucho trabajo por hacer".
Brown confía en un acuerdo de medidas concretas
En una línea similar se pronunció el primer ministro británico, Gordon Brown, quien reconoció que las conversaciones son difíciles pero espera que los países logren un acuerdo durante la reunión para adoptar medidas concretas.
Uno de los borradores del documento final que se debaten en la cumbre pasa de puntillas sobre las discrepancias entre Estados Unidos y Europa para fortalecer la regulación de los mercados.
En el mismo documento, figuran la posibilidad de una segunda reunión de gobernantes del G20 en Europa, posiblemente Londres, entre abril y mayo.
Diferencias sobre la intervención estatal
Las principales diferencias en esta cumbre de países desarrollados y emergentes se refieren a la intervención estatal y la regulación de los mercados.
La Unión Europea propone que se endurezca la regulación, especialmente en cuanto al funcionamiento de los fondos de alto riesgo y a las indemnizaciones de los directivos, algo a lo que Estados Unidos se opone.
El borrador de la declaración final de la cumbre deja a cada país la opción de elegir sus propias medidas, pero pone como plazo máximo el 31 de marzo para que cada Gobierno extienda la vigilancia de los fondos de alto riesgo y ejerza un mayor control sobre las firmas de calificación de riesgo.
Se espera que la declaración final apoye los pasos que cada país ha dado para frenar el deterioro económico, especialmente aquellos que han puesto en marcha planes de estímulos fiscales y medidas monetarias, como rebajas de tipos de interés.
Éste es uno de los grandes caballos de batalla en EE.UU. El presidente electo es partidario de un nuevo conjunto medidas de estímulo y presiona al Congreso para que lo apruebe antes de que tome posesión el nuevo Gobierno.
Si el Congreso no actuara, Obama ha prometido que será lo primero que haga apenas llegue a la Casa Blanca, el 20 de enero.
Bush y el Partido Republicano, por el contrario, son menos partidarios de poner en marcha ese plan, aunque no lo han descartado de manera tajante.
La cumbre de hoy tiene prevista su conclusión para las 15.00 hora local (20.00 GMT), cuando Bush leerá el comunicado final.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
En unas declaraciones al comenzar la reunión de las principales economías desarrolladas y en desarrollo, Bush se declaró "complacido" con los progresos alcanzados para atajar la crisis financiera y para trazar medidas que impidan que se repita.
El presidente también expresó su satisfacción porque los líderes que participan en la cumbre han "reafirmado los principios que respaldan la apertura de mercados y el libre comercio".
"Uno de los peligros en una crisis como ésta es que la gente empiece a poner en marcha políticas proteccionistas", declaró. Bush advirtió de que la crisis "no ha acabado" y agregó que, aunque se han logrado algunos progresos, "aún queda mucho trabajo por hacer".
Brown confía en un acuerdo de medidas concretas
En una línea similar se pronunció el primer ministro británico, Gordon Brown, quien reconoció que las conversaciones son difíciles pero espera que los países logren un acuerdo durante la reunión para adoptar medidas concretas.
Uno de los borradores del documento final que se debaten en la cumbre pasa de puntillas sobre las discrepancias entre Estados Unidos y Europa para fortalecer la regulación de los mercados.
En el mismo documento, figuran la posibilidad de una segunda reunión de gobernantes del G20 en Europa, posiblemente Londres, entre abril y mayo.
Diferencias sobre la intervención estatal
Las principales diferencias en esta cumbre de países desarrollados y emergentes se refieren a la intervención estatal y la regulación de los mercados.
La Unión Europea propone que se endurezca la regulación, especialmente en cuanto al funcionamiento de los fondos de alto riesgo y a las indemnizaciones de los directivos, algo a lo que Estados Unidos se opone.
El borrador de la declaración final de la cumbre deja a cada país la opción de elegir sus propias medidas, pero pone como plazo máximo el 31 de marzo para que cada Gobierno extienda la vigilancia de los fondos de alto riesgo y ejerza un mayor control sobre las firmas de calificación de riesgo.
Se espera que la declaración final apoye los pasos que cada país ha dado para frenar el deterioro económico, especialmente aquellos que han puesto en marcha planes de estímulos fiscales y medidas monetarias, como rebajas de tipos de interés.
Éste es uno de los grandes caballos de batalla en EE.UU. El presidente electo es partidario de un nuevo conjunto medidas de estímulo y presiona al Congreso para que lo apruebe antes de que tome posesión el nuevo Gobierno.
Si el Congreso no actuara, Obama ha prometido que será lo primero que haga apenas llegue a la Casa Blanca, el 20 de enero.
Bush y el Partido Republicano, por el contrario, son menos partidarios de poner en marcha ese plan, aunque no lo han descartado de manera tajante.
La cumbre de hoy tiene prevista su conclusión para las 15.00 hora local (20.00 GMT), cuando Bush leerá el comunicado final.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
LULA CALIFICA DE HISTÓRICA A CUMBRE DEL G-20
"Sólo puedo decir que el día de hoy es histórico", señaló Lula en unas breves declaraciones tras la cumbre, que reunió a los principales países avanzados y en desarrollo para iniciar el proceso de reforma del sistema financiero mundial.
"Salgo de aquí con la certeza de que la geografía política del mundo ha ganado una nueva dimensión", declaró el presidente brasileño antes de reunirse con su homólogo chino, Hu Jintao.
Brasil ha reclamado durante años una mayor influencia de los países en desarrollo en los foros e instituciones internacionales, así como su entrada en el G-8, de los países más ricos.
Lula dijo que la importancia ganada por el G-20 no supone el fin del G-8, pero ese grupo se quedará como "un club de amigos", en su opinión.
El presidente brasileño afirmó que hace seis meses nunca habría imaginado que el G-20 iba a ser el grupo designado "para definir de forma colectiva la reforma de la economía mundial".
Los participantes en la cumbre convocaron otra reunión de jefes de Estado y de Gobierno del G20 para antes del 30 de abril, lo que Brasil ha interpretado como una consolidación del grupo como el foro en el que se decidirá el futuro del sistema financiero mundial.
El G-20, que Brasil preside actualmente, fue creado en 1999 tras la crisis asiática como un espacio de encuentro de los ministros de economía de países desarrollados y en desarrollo.
Viejo Condor
IA Novosti (SIC)
"Salgo de aquí con la certeza de que la geografía política del mundo ha ganado una nueva dimensión", declaró el presidente brasileño antes de reunirse con su homólogo chino, Hu Jintao.
Brasil ha reclamado durante años una mayor influencia de los países en desarrollo en los foros e instituciones internacionales, así como su entrada en el G-8, de los países más ricos.
Lula dijo que la importancia ganada por el G-20 no supone el fin del G-8, pero ese grupo se quedará como "un club de amigos", en su opinión.
El presidente brasileño afirmó que hace seis meses nunca habría imaginado que el G-20 iba a ser el grupo designado "para definir de forma colectiva la reforma de la economía mundial".
Los participantes en la cumbre convocaron otra reunión de jefes de Estado y de Gobierno del G20 para antes del 30 de abril, lo que Brasil ha interpretado como una consolidación del grupo como el foro en el que se decidirá el futuro del sistema financiero mundial.
El G-20, que Brasil preside actualmente, fue creado en 1999 tras la crisis asiática como un espacio de encuentro de los ministros de economía de países desarrollados y en desarrollo.
Viejo Condor
IA Novosti (SIC)
LA PRÓXIMA CUMBRE DEL G-20 SE CELEBRARÁ A MÁS TARDAR EN ABRIL DE 2009
La próxima cumbre del Grupo de los Veinte (G-20) deberá celebrarse a más tardar el 30 de abril de 2009, informó hoy el auxiliar del presidente ruso Arkadi Dvorkóvich.
"La primera jornada de la cumbre de Washington muestra que sus participantes tienen plena conciencia de que los problemas globales requieren soluciones globales, y acordaron celebrar otra cumbre a más tardar el 30 de abril del año entrante", comunicó.
"Ese acuerdo será incluido en la declaración final que aprobarán los participantes en la cumbre del G-20", agregó Dvorkóvich.
En Washington hoy se inauguró la Cumbre sobre la crisis financiera del G-20, organismo formado por los países más industrializados del G-8 y por los principales países emergentes.
Los participantes en el foro buscan una salida a la crisis financiera global y ofrecen sus propuestas para reformar la arquitectura financiera mundial.
Dvorkóvich comentó que durante esta primera jornada han intervenido 14 personas, incluido el presidente ruso Dmitri Medvédev.
"El presidente llamó la atención de sus colegas sobre el hecho de que la estructura de la seguridad financiera mundial es ineficaz y se necesitan nuevas instituciones financieras que respondan a las necesidades de hoy", apuntó.
"Pero se debe obrar muy rápido para evitar que los problemas del sector financiero afecten el sector real de la economía, y los líderes mundiales están convencidos de que es posible hacerlo", destacó el auxiliar del presidente ruso.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
o
"La primera jornada de la cumbre de Washington muestra que sus participantes tienen plena conciencia de que los problemas globales requieren soluciones globales, y acordaron celebrar otra cumbre a más tardar el 30 de abril del año entrante", comunicó.
"Ese acuerdo será incluido en la declaración final que aprobarán los participantes en la cumbre del G-20", agregó Dvorkóvich.
En Washington hoy se inauguró la Cumbre sobre la crisis financiera del G-20, organismo formado por los países más industrializados del G-8 y por los principales países emergentes.
Los participantes en el foro buscan una salida a la crisis financiera global y ofrecen sus propuestas para reformar la arquitectura financiera mundial.
Dvorkóvich comentó que durante esta primera jornada han intervenido 14 personas, incluido el presidente ruso Dmitri Medvédev.
"El presidente llamó la atención de sus colegas sobre el hecho de que la estructura de la seguridad financiera mundial es ineficaz y se necesitan nuevas instituciones financieras que respondan a las necesidades de hoy", apuntó.
"Pero se debe obrar muy rápido para evitar que los problemas del sector financiero afecten el sector real de la economía, y los líderes mundiales están convencidos de que es posible hacerlo", destacó el auxiliar del presidente ruso.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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RUSIA APOYA LA DECLARACIÓN FINAL QUE APROBARÁN LOS PARTICIPANTES EN LA CUMBRE DEL G-20
El presidente ruso Dmitri Medvédev intervino hoy en la cumbre del Grupo de los Veinte (G-20) inaugurada en Washington y aseguró que Rusia apoya la declaración final que aprobarán los participantes.
"La parte rusa apoya ese documento porque enumera la mayoría de los problemas y toma en cuenta todo lo que nos preocupa ahora", dijo Medvédev.
"Si todos los países trabajamos juntos, sabremos superar las dificultades", manifestó el líder ruso.
Agregó que Rusia "está adoptando todas las medidas necesarias para paliar las consecuencias de la crisis financiera global".
En Washington hoy se inauguró la Cumbre sobre la crisis financiera del G-20, formado por los países más industrializados del G-8 y por los principales países emergentes.
Los participantes en el foro buscan una salida a la crisis financiera global y ofrecen sus propuestas para reformar la arquitectura financiera mundial.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
"La parte rusa apoya ese documento porque enumera la mayoría de los problemas y toma en cuenta todo lo que nos preocupa ahora", dijo Medvédev.
"Si todos los países trabajamos juntos, sabremos superar las dificultades", manifestó el líder ruso.
Agregó que Rusia "está adoptando todas las medidas necesarias para paliar las consecuencias de la crisis financiera global".
En Washington hoy se inauguró la Cumbre sobre la crisis financiera del G-20, formado por los países más industrializados del G-8 y por los principales países emergentes.
Los participantes en el foro buscan una salida a la crisis financiera global y ofrecen sus propuestas para reformar la arquitectura financiera mundial.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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