Granjeros polacos quieren vender sus manzanas por debajo del precio de mercado, lo que podría arruinar a agricultores de Alemania, Francia, Países Bajos y Bélgica. Así quieren llamar la atención de la Unión Europea por el embargo impuesto por Rusia.
En Polonia el precio de un kilo de manzanas es de 0,10 zlotys polacos (unos 3 centavos estadounidenses), pero a pesar de eso los granjeros pasan todos los días haciendo fila en los puntos de venta a la espera de encontrar clientes, informa Radio Vesti.
"En un día ha desaparecido el mayor mercado para las manzanas polacas", se lamenta Miroslaw Maliszewski, parlamentario del Partido Campesino Polaco. Del millón de toneladas de manzanas que Polonia exportó el año pasado 900.000 se destinaron a la Federación de Rusia. Teniendo al lado un mercado tan grande para sus productos, los granjeros polacos no se preocuparon por buscar otras alternativas.
Debido a las restricciones agroalimentarias impuestas por Rusia en respuesta a las sanciones europeas, el desempleo está creciendo en Polonia a pasos agigantados. Conductores de camiones, personal de aduana y empaquetadores de manzanas en las fábricas se están quedando en el paro. Pero son los granjeros quienes tienen más pérdidas. ''Si la Unión Europea no nos ayuda, tendremos que vender nuestras manzanas bastante por debajo de su costo en el mercado europeo. Las consecuencias las van a notar los granjeros alemanes, italianos, franceses, neerlandeses y belgas. Vamos a ofrecer tales precios que no podrán sobrevivir en el mercado", advierte Maliszewski.
Los agricultores polacos no quieren abandonar el mercado ruso, ya que los últimos años surgieron fuertes vínculos con sus clientes. Los granjeros se están movilizando e invitan a la población a participar en una manifestación que próximamente tendrá lugar en la carretera que conecta a Polonia con Berlín y Bruselas. ''Vamos a demostrar la fuerza que tenemos y lucharemos por la libertad que nos quitó la Unión Europea por sus decisiones políticas equivocadas'', sostienen los promotores de la protesta.
"En un día ha desaparecido el mayor mercado para las manzanas polacas", se lamenta Miroslaw Maliszewski, parlamentario del Partido Campesino Polaco. Del millón de toneladas de manzanas que Polonia exportó el año pasado 900.000 se destinaron a la Federación de Rusia. Teniendo al lado un mercado tan grande para sus productos, los granjeros polacos no se preocuparon por buscar otras alternativas.
Debido a las restricciones agroalimentarias impuestas por Rusia en respuesta a las sanciones europeas, el desempleo está creciendo en Polonia a pasos agigantados. Conductores de camiones, personal de aduana y empaquetadores de manzanas en las fábricas se están quedando en el paro. Pero son los granjeros quienes tienen más pérdidas. ''Si la Unión Europea no nos ayuda, tendremos que vender nuestras manzanas bastante por debajo de su costo en el mercado europeo. Las consecuencias las van a notar los granjeros alemanes, italianos, franceses, neerlandeses y belgas. Vamos a ofrecer tales precios que no podrán sobrevivir en el mercado", advierte Maliszewski.
Los agricultores polacos no quieren abandonar el mercado ruso, ya que los últimos años surgieron fuertes vínculos con sus clientes. Los granjeros se están movilizando e invitan a la población a participar en una manifestación que próximamente tendrá lugar en la carretera que conecta a Polonia con Berlín y Bruselas. ''Vamos a demostrar la fuerza que tenemos y lucharemos por la libertad que nos quitó la Unión Europea por sus decisiones políticas equivocadas'', sostienen los promotores de la protesta.
Viejo Condor
RT (SIC)
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