Cohete Unha-3 (archivo)
Corea del Norte instaló en el centro espacial de Sohae la primera fase de su cohete de largo alcance que prevé lanzar a mediados de este mes de diciembre para supuestamente poner en órbita un satélite de investigación, informó hoy la agencia surcoreana Yonhap.
Fuentes diplomáticas citadas por el medio afirmaron que la colocación del cohete significa que Pyongyang “comenzó los preparativos para lanzar un misil de largo alcance”. El cohete puede estar listo para el despegue en tres o cuatro días, que es el plazo necesario para montar las restantes dos fases, según los servicios secretos surcoreanos.
Estas informaciones se ajustan a lo anunciado por el propio país comunista, que el pasado sábado hizo públicos sus planes de lanzar el cohete entre el 10 y el 22 de diciembre. La agencia japonesa Kyodo comunicó este lunes que Pyongyang notificó a Tokio que el despegue tendrá lugar entre las 7:00 y las 12:00 hora local en una de las fechas previstas.
Ante este lanzamiento que, según se sospecha, constituye un ensayo encubierto de un misil de largo alcance, la Armada nipona inició el despliegue de sistemas antiaéreos Patriot. Esta mañana, un buque con estos misiles a bordo partió desde una base naval de Hiroshima rumbo a Okinawa. También se están preparando varios destructores equipados con el sistema Aegis capaz de seguir el vuelo de un misil en la atmósfera.
El Ministerio de Defensa de Japón afirmó que no tiene la intención de derribar el cohete norcoreano mientras no represente amenaza para la seguridad nacional. No obstante, el Ejército actuará en una situación de emergencia interceptando el cohete o sus fragmentos para evitar que caigan en territorio nipón.
Además, tras el anuncio del país comunista, Corea del Sur y EEUU ampliaron sus actividades de espionaje en el territorio norcoreano, comunicó la prensa surcoreana.
Entretanto, Rusia llamó hoy a Corea del Norte a reconsiderar sus planes de lanzar un cohete de largo alcance y se mostró dispuesta a “continuar, junto con sus socios de las negociaciones a seis bandas, con los esfuerzos para dar solución a los problemas de la península de Corea”. Al mismo tiempo, Moscú subrayó que reconoce el derecho de Pyongyang a un programa espacial pacífico, siempre y cuando se desarrolle tras el levantamiento de las sanciones impuestas por la ONU.
En abril pasado, Corea del Norte lanzó el cohete Unha-3 que supuestamente debía ubicar en órbita un satélite de observación. El lanzamiento terminó en fracaso tras varias semanas de tensión internacional ante lo que se sospechaba era un ensayo balístico encubierto.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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