Francia informó a Rusia sobre su intervención militar en Malí, por lo que Moscú no tiene ningún reproche para París, afirmó anoche el embajador ruso ante las Naciones Unidas, Vitali Churkin.
Según el diplomático, la operación que el Ejército galo desarrolla desde el pasado viernes en Malí para detener el avance de los rebeldes islamistas, no se contradice con la legislación internacional, puesto que el despliegue de las tropas se realizó en atención a una solicitud por parte del país africano.
“En términos generales, lo que están haciendo los franceses y lo que van a hacer los británicos, se ajusta a la resolución 2.085 y se corresponde con el Derecho Internacional, porque se recurrió al uso de las fuerzas armadas por petición del Gobierno de Malí”, explicó Churkin momentos antes de asistir a consultas a puerta cerrada sobre Malí que celebró la víspera el Consejo de Seguridad.
Recalcó que el Gobierno francés informó a Moscú sobre su actuación en el país africano y que en sentido Rusia “no tiene queja alguna”.
Las fuerzas francesas ayudan al Gobierno maliense a combatir a las milicias yihadistas que controlan el norte del país y que en las últimas semanas lanzaron una ofensiva contra las posiciones del Ejército en la región central. La intervención gala es apoyada por el Reino Unido, país que facilitó aviones de carga para la operación.
El presidente de Francia, François Hollande, declaró este martes que la operación durará siete días más y que los 750 soldados galos que ya participan en ella serán reforzados con más compañeros para “poder pasar el relevo lo antes posible a las fuerzas africanas”.
Por su parte, el jefe de la diplomacia francesa, Laurent Fabius, anunció que a finales de enero se celebrará una conferencia de países donantes que aportarán financiación a la misión conjunta africana en Malí.
Según las últimas informaciones, los bombardeos de la aviación francesa obligaron anoche a los islamistas a comenzar la retirada de sus bastiones en el norte de Malí, como Timbuktu, Gao y Duenza.
No obstante, un portavoz del grupo radical Ansar Dine definió esta retirada de “táctica” y aseguró que forma parte de un plan para relocalizar las fuerzas rebeldes.
Mientras tanto, la operación militar francesa no sustituye la misión de la fuerza conjunta africana AFISMA, recordó anoche el embajador de Francia ante la ONU, Gérard Araud. “Nuestras prioridades políticas se mantienen inalterables, es cumplir rápida y plenamente la resolución 2.085, en particular en lo que se refiere al despliegue de las fuerzas africanas”, aseveró el diplomático, al agregar que este despliegue se producirá en los “próximos días o semanas”.
Según Araud, Francia cuenta con el apoyo de todos los miembros del Consejo de Seguridad y ha recibido propuestas de ayuda por parte de EEUU, Canadá, Bélgica, Dinamarca y Alemania, además del Reino Unido, país que ya está prestando apoyo logístico a la operación en Malí.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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