El presidente de Siria, Bashar Asad, aprobó una ley que impone la pena capital para implicados en el suministro de armas a terroristas, informaron este martes medios sirios.
Además, la nueva ley prevé penas de hasta 15 años de cárcel y trabajos forzados para traficantes de armas y la cadena perpetua a delitos de contrabando de armas a Siria para su comercialización o uso en atentados terroristas.
Desde el pasado mes de marzo Siria es escenario de protestas antigubernamentales que comenzaron en Deraa, en el sur del país, y posteriormente se propagaron a otras zonas. La oposición reclama la renuncia del presidente Bashar Asad, exigencia que apoya Estados Unidos y la Unión Europea.
Según la ONU, los enfrentamientos entre los seguidores y los detractores del régimen sirio han costado ya más de 5.000 vidas, mientras que las autoridades del país árabe informan sobre unos 1.500 muertos, incluidos más de 1.100 agentes de seguridad entre ambos bandos.
El conflicto sirio es cada vez más violento, lo que se debe, en particular, a la creación del llamado Ejército Libre Sirio integrado por soldados desertores en una zona fronteriza con Turquía y cuyo objetivo es la lucha armada contra el Gobierno de Damasco.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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