"Es un concepto viable que permitiría consensuar una postura colectiva y dialogar tanto con las autoridades y el presidente de Siria (Bashar Asad) como con los representantes de la oposición", dijo Medvédev en una reunión del Consejo de Seguridad de Rusia.
Rusia y China ejercieron el martes pasado su derecho a veto en el Consejo de Seguridad de la ONU para evitar que fuera aprobado el anteproyecto de resolución sobre Siria elaborado por Reino Unido, Francia, Alemania y Portugal.
El documento preveía la aplicación de sanciones en caso de que las autoridades sirias prosiguieran con la represión de las protestas populares. El anteproyecto no contenía ninguna cláusula sobre la inadmisibilidad de una intervención militar externa.
En opinión de Moscú, esto puede hacer que se repita el "guión libio" en Siria y se menoscabe el prestigio del Consejo de Seguridad de la ONU.
"El hecho de que los países occidentales no incluyeran la cláusula sobre la inadmisibilidad de una intervención militar significa que no descartan la repetición del guión libio, algo que Rusia no puede aceptar por mucha preocupación que le suscite la situación en Siria", comentó Medvédev.
Siria es escenario de protestas populares desde marzo pasado. Los manifestantes exigen la renuncia del presidente Bashar Asad y la implantación de reformas políticas. Países como Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania, así como la Unión Europea, también piden a Asad abandonar el poder.
Viejo Condor
RIA Novosti (SiC)
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