La reducción de contactos entre Alemania y Rusia puede perjudicar tanto a los dos países como a la región entera, declaró el canciller ruso, Serguéi Lavrov.
“Una disminución de la cooperación ruso-alemana afectaría negativamente no solo a los dos países y sus economías sino también a toda la región euro-atlántica”, dijo en una entrevista con el periódico Handelsblatt.
Expresó la esperanza de regresar a una “cooperación equitativa y mutuamente beneficiosa”.
“Estamos abiertos a cualquier iniciativa razonable por parte de Alemania con el fin de mejorar la situación”, indicó.
Lavrov mencionó el tema de la crisis en Ucrania al subrayar la importancia del cumplimiento de los acuerdos de Minsk logrados el pasado 12 de febrero.
“Coincidimos en que una escalada de la tensión tendría las consecuencias más negativas tanto para la misma Ucrania como para todo el sistema de seguridad europeo”, comentó.
Por eso Rusia y Alemania están interesados en que la crisis sea solucionada lo más pronto posible y basándose en los acuerdos de Minsk, destacó.
“Me gustaría pensar que tanto Berlín como Moscú no están interesados en una nueva profunda ruptura de Europa”, afirmó Lavrov.
Argumentó que la frustración en los asuntos europeos afectaría a la capacidad de las potencias mundiales de colaborar para solucionar problemas como el terrorismo, el control de armas o los conflictos en Oriente Medio o África del Norte.
En ese sentido destacó la necesidad de “librarse de la costumbre de considerar cada problema de manera separada”, porque “la falta de visión estratégica global amenaza con la pérdida de capacidad para tomar decisiones adecuadas”.
Viejo Condor
Sputnik Mundo (SIC)
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