La ola de protestas musulmanes causada por la película La inocencia de los musulmanes adquirió la fuerza de un tsunami a escala mundial.
Tras las embajadas de EEUU la oleada de descontento cubrió las misiones diplomáticas de Alemania, Gran Bretaña y han llegado a las embajadas de Israel.
En Jartum, la capital de Sudán, miles de personas atacaron las embajadas de EEUU, Alemania y el Reino Unido.
En Túnez, los manifestantes han lanzado toda una lluvia de piedras a la embajada estadounidense.
Los árboles y automóviles en su territorio fueron prendidos en llamas, fue izada la bandera negra de salafi.
Tras las oraciones del viernes, los disturbios tuvieron lugar en la ciudad de Trípoli en el norte de Líbano, en Egipto y Yemen.
En respuesta, los EEUU se vieron obligados a defenderse.
De inmediato tuvieron que cerrar sus embajadas en Nigeria, Lagos, e incluso en algunos países de Europa Occidental.
Para proteger a los cuerpos diplomáticos, el Pentágono envió a Libia la infantería marina.
“La fiebre antinorteamericana” tarde o temprano debía abrazar al mundo musulmán, considera el analista político Stanislav Tarasov.
—El asesinato del embajador norteamericano en Benghasi, desde luego es una tragedia.
Por otro lado, es un resultado de la política que maneja los EEUU en el mundo islámico.
Esta política se maneja con una presencia militar.
En Irak, más de un millón de personas murieron tras la agresión estadounidense.
Las tropas norteamericanas se encuentran en Afganistán.
Sabemos que los cambios en Libia resultaron a un precio muy alto.
En ese entonces Occidente estaba callado.
El sentimiento antinorteamericano en el mundo islámico es muy fuerte y a gran escala.
“El escandalo con las caricaturas” en Europa occidental hace varios años fue la primera señal.
La película La inocencia de los musulmanes, que al igual que en las caricaturas, el profeta Mahoma se presenta de una forma indebida.
Este es un nuevo eslabón en la cadena, considera Gumer Isayev, analista del centro de San Petersburgo para Estudios del Medio Oriente:
—Miren lo que ocurre: el sentimiento antinorteamericano se explota en aquellos países en los que hubo un cambio de Gobierno.
Esta “película”, entre comillas, por supuesto, es una provocación.
Aquí las autoridades deben entender que de alguna manera se necesita limitar a los ciudadanos de exponer sus ideas y más aún de publicarlas en internet de libre acceso.
Hay que entender y anticipar las posibles consecuencias y la reacción.
Mientras tanto, Google ha rechazado la petición de las autoridades estadounidenses de quitar la película de la red.
Sin embargo, esta decisión no decepcionó a Washington.
Como sea, los pogromos se extendieron a Asia. Sobre todo a Islamabad, Peshawar, Lahore, Karachi y otras ciudades de Pakistán.
Los manifestantes quemaban las banderas de los Estados Unidos bajo las consignas: “¡Muerte a la blasfemia! Muerte a los EEUU!”
¿Después de esto, cómo pretenden construir los Estados Unidos las relaciones con el mundo musulmán?
Andrei Volodin del Centro de Estudios Orientales de la Academia Diplomática de Rusia opina lo siguiente:
—Los acontecimientos que ocurren en la actualidad, es una continuación de las revoluciones árabes que realmente empiezan a cambiar no sólo el Oriente Medio sino también al mundo en general. Los EEUU se siente en esta situación bastante incomoda.
Ellos pueden, por supuesto, hablar mucho de que controlan los procesos de las revoluciones árabes.
Pero en realidad, se ven obligados a adaptarse a estos procesos.
Viejo Condor
La Voz de Rusia (SIC)
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