Rusia está satisfecha con el "verdadero comienzo " de la misión de observadores de la Liga Árabe” en Siria y la disposición de cooperar del gobierno sirio, informó el departamento de prensa del Ministerio de Asuntos Exteriores.
“Moscú está satisfecha con el trabajo de los observadores árabes que ya se han desplegado en varias partes de Siria, una situación que Rusia siempre solicitó para obtener información objetiva imparcial de lo que sucede en territorio sirio”, se señala en un comunicado de la cancillería.
El documento subraya que "era claro que los observadores tenían mucho que hacer por delante en especial con la población por lo que exhortaban al Gobierno sirio a no debilitar la cooperación constructiva con la Misión para crear condiciones favorables para el ejercicio de sus funciones".
La cancillería rusa también expresó esperanza que los observadores actúen con profesionalismo e imparcialidad y que Moscú "consideraba muy importante apoyar a nivel internacional y regional a la Misión árabe para que logre sus cometidos”, dijo la Cancillería rusa.
Antes el jefe de la misión de observadores árabes, el general sudanés Mohamed Al Dabi, dijo que la parte siria está "cooperando plenamente" con los supervisores, dando libertad de circulación en todo el país para dar cumplimiento al protocolo firmado.
Al Dabi indicó que la situación en el corazón de los movimientos de protesta en Siria, la ciudad de Homs “daba esperanzas de ánimo porque no había registrado nuevos enfrentamientos".
Los observadores de la Liga Árabe visitaron las regiones de Al-Insaat, al Arman, Az Zahir, Al Muhadzharin, así como una de las zonas más concurridas del país Baba Amr en la ciudad de Homs.
Desde hace más de ochos meses en Siria no cesan protestas antigubernamentales, que ya causaron más de cuatro mil víctimas mortales, según datos de la ONU. La oposición exige la destitución del presidente del país, Bashar Asad. EEUU y varios países occidentales, al apoyar tal demanda, impusieron sanciones económicas contra Siria.
Un grupo de observadores árabes, encabezados por el general Al Dabi, llegó a Damasco el lunes, 26 de diciembre para poner fin al derramamiento de sangre en Siria y crear las condiciones para el diálogo entre las autoridades y la oposición.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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