Barack Obama
Dos ciudadanos estadounidenses – el ex disidente soviético Eduard Lozansky y su antiguo socio Antony Salvia - presentaron al Tribunal Federal de Washington una demanda exigiendo del presidente Barack Obama abolir la enmienda Jackson-Vanik que obstruye el comercio entre EEUU y Rusia, escribe hoy el diario Kommersant.
Los demandantes alegan que se trata de un vestigio de la Guerra Fría y un gran escollo para el desarrollo del intercambio comercial con Rusia. Sostienen que el jefe del Estado no tiene por qué esperar la aprobación de legisladores al respecto y puede anular la polémica enmienda por decisión propia. “Queremos demostrar que el presidente Obama tiene derecho constitucional de abolir la enmienda Jackson-Vanik sin votación en el Congreso”, explicó Lozansky, quien encabeza actualmente la Universidad Americana de Moscú.
La enmienda de Jackson-Vanik, que fue introducida a la Ley del Comercio de EEUU en 1974 y cuya verdadera autoría se atribuye al entonces secretario de Estado Henry Kissinger, prohíbe conceder el trato de nación más favorecida en el comercio y castiga con aranceles discriminatorios a los países que restringen la economía de mercado y la libre emigración de sus ciudadanos, como era por ejemplo el caso de los judíos en la Unión Soviética. Desde 1989, Washington decreta anualmente moratorias sobre esa enmienda sin abolirla oficialmente.
“Rusia es una economía de mercado y un país que no limita la emigración, por lo que debe ser excluida automáticamente de esa lista negra”, destacó Lozansky. Los defensores de la enmienda Jackson-Vanik, según él, infringen las leyes de EEUU. “Es más, también incurre en una infracción el presidente Obama, pues está facultado para decretar su abolición al margen de la votación en el Congreso”, dijo.
La enmienda, a su juicio, impide a EEUU votar por la admisión de Rusia a la Organización Mundial de Comercio (OMC) y, por tanto, privará a las empresas estadounidenses del trato preferencial cuando el ingreso sea un hecho consumado.
Abogados de Bailey Gary PC, pequeño bufete que representa a los demandantes, confían en ganar la demanda interpuesta al Tribunal Federal de Washington y usar esa victoria en mayo próximo, cuando haya debates sobre la adhesión de Rusia a la OMC.
El director del Centro Carnegie de Moscú, Dmitri Trenin, cuestionó en declaraciones a Kommersant que un pleito rutinario vaya a “truncar” al Congreso de EEUU pero atribuyó gran importancia a la iniciativa de Lozansky y Salvia porque se enmarca en los esfuerzos de la Administración de Obama.
El vicepresidente de EEUU, Joseph Biden, quien estuvo de visita en Moscú el pasado mes de marzo, aseguró que la abolición de la enmienda Jackson-Vanik será una de las prioridades de la política exterior de Washington.
Viejo Condor
RIA Novosti (SIC)
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